La Cofepris iba a clausurar el viejo rastro, pero los inspectores federales permitieron que siguiera trabajando porque vieron que el Municipio estaba por terminar el nuevo edificio, pero todavía no se define nada sobre la compra del equipo.
El Ayuntamiento todavía no define la fecha en que pondrá en funcionamiento el Rastro Municipal, pues todavía falta comprar los aparatos eléctricos que exige la Secretaría de Salud. Además el inmueble todavía no cuenta con el servicio de agua potable.
El administrador del Rastro, Jesús Hernández Murillo, informó que el día de ayer realizaron un recorrido por el nuevo inmueble los responsables del área de Regulación Sanitaria para verificar los detalles que le faltan.
“Ya sabemos que falta la maquinaria, la sierra eléctrica, la lavadora de menudo, la pistola, pero además vimos que en el cuarto frío falta poner las perchas donde se va a colgar la canal y falta forrar con una buena pasta resistente o con lámina de acero inoxidable”, dijo.
Hernández Murillo comentó que durante el recorrido lo que más les sorprendió es que el edificio no tiene agua potable porque el Municipio no ha tramitado el contrato ante el Sistema Municipal de Agua y Saneamiento (Simas), por lo tanto no han instalado la tubería.
“Yo creo que han hecho decidia con eso del agua, pero ese detalle se soluciona rápido, lo que hace falta es comprar la maquinaria”, agregó.
El administrador dijo que ahora sólo falta que la Tesorería Municipal defina la fecha en que van a comprar esa maquinaria, porque es indispensable contar con este equipo para que el inmueble pueda empezar a funcionar.
“No sé como andan de dinero, ellos tienen que buscar la forma de comprar todo lo que nos falta, porque de lo contrario no nos van a dar la licencia para empezar a trabajar”, dijo.
Hernández Murillo informó que en el mes de julio el personal de la Comisión Federal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Cofepris), visitó el Municipio con la intención de clausurar el viejo Rastro, pero no lo hicieron porque se les demostró que estaban terminando los últimos detalles del nuevo edificio, pero los empleados de la dependencia federal le notificaron que en unas semanas volverían para verificar que estuviera en funcionamiento el nuevo inmueble.