La menor de cinco años que fue reportada ayer lunes como muerta, sobrevive, aunque su estado de salud es grave debido a dos lesiones de arma de fuego.
En un reporte de las autoridades judiciales de ayer lunes se informó del hallazgo de cuatro cuerpos, entre ellos el de la menor, en el poblado de Guadalupe Reyes, en Cosala.
Los cadáveres correspondían, se dijo, a Conrado López Carrazo, de 63 años de edad; Bernardo Navarrete, de 27; Maximiliano Burgos Mendoza, de 16; y la niña Wendy Vega Peña, de solo cinco años de edad.
Sin embargo, esta mañana de martes se precisó que la menor permanece internada en un nosocomio con dos heridas de arma de fuego.
Las autoridades judiciales revelaron también que grupos mixtos del Ejército y de las diversas corporaciones inspeccionan los poblados de la sierra colindantes con Durango, donde se presume se ocultan los atacantes de la familia.
Según el reciente reporte de la Policía Ministerial del Estado, los dos adultos y los menores de edad viajaban en una camioneta Chevrolet Sierra, color azul, modelo 1988, placas de circulación TT 65297, procedentes de Guadalupe de los Reyes, Cósala, cuando un comando con rifles AK-47 les disparó en diversas ocasiones.
Los nombres de los tres fallecidos también fueron precisados; corresponden a Conrado Peña Carrasco, de 63 años; el adolescente Maxinio Burgos Mercado, de 16, y Bernardo Navarrete.
En tanto que la menor fue auxiliada por vecinos de un poblado cercano que escucharon las detonaciones y trasladada en un helicóptero a un hospital.