Esta imagen fue tomada poco antes de que los soldados coartaran la libertad de prensa.
Durango. Después de que se suscitaran los “granadazos” en contra de agentes de la PGJE tanto la DEI como los efectivos del Ejército siguieron realizando recorridos por toda la ciudad para localizar a los delincuentes y tras recibir el reporte de dos camionetas con sujetos fuertemente armados en el Barrio de Tierra Blanca acudieron al lugar para corroborar la información, al igual que uno de los reporteros gráficos de esta casa editora quien pretendía captar la imagen en caso de que los detuvieran, ya que la ciudadanía tiene derecho de estar informada, al igual que las corporaciones están obligadas a comunicar algún suceso, sin embargo, el fotógrafo fue amenazado por uno de los soldados.
Coartan la libertad de informar.
Eran las 20:30 del martes cuando se recibió el reporte de que en la calle Lerdo, entre Bravo y Urrea, del barrio de Tierra Blanca, había dos camionetas blancas con sujetos armados y tras acudir los agentes de la DEI y del Ejército desplegaron un operativo para corroborar la información, mientras que uno de los reporteros gráficos de este medio de comunicación empezó a tomar fotos desde lejos para captar la imagen en caso de que se atrevieran a detener a los presuntos sicarios.
Enfrente del fotógrafo se paró un soldado y le preguntó que por qué tomaba fotos y éste mostrando su gafete de identificación contestó que para informar a la ciudadanía, pero el militar le dijo de manera prepotente y amenazante “no vuelvas a tomar una foto o te quito la cámara y es la única vez que te lo digo”.
Por tal razón no se supo si los soldados aprehendieron a los presuntos sicarios, los dejaron ir o si la llamada fue real.
