TRASLADO. El cuerpo fue retirado por trabajadores de la funeraria.
Luego de que su hija y sus nietas la abandonaran días anteriores, María Dolores Fernández Molina, de 48 años, decidió quitarse la vida ayer por la mañana.
Ahorcada
Guillermo Buzo Hernández, amigo de la hoy occisa, comentó que la noche anterior había estado platicando con María Dolores y la había encontrado muy triste por la partida de su hija.
“Fue a platicar conmigo y le dije que la iba a buscar por la mañana para ver cómo seguía”, dijo Guillermo Buzo.
De madrugada
Eran las 8:00 de la mañana, cuando su amigo encontró el cuerpo de María Dolores colgando de una de las vigas de su patio.
A un lado del cuerpo se encontraba la silla de donde había saltado.
Agentes Investigadores del ejido Los Ángeles, de Matamoros, lugar donde se dieron los hechos, asistieron al lugar para dar fe de los hechos.
María Dolores dejó dos cartas póstumas, una de ellas para la hija que la abandonó y otra más para una de sus vecinas.
Según el reporte de David Alberto, agente investigador, la hoy occisa llevaba cerca de tres horas de haber perecido.