“Sólo me defendí”, fue el argumento del sujeto acusado del homicidio de un taxista que asegura fue atacado por el chofer, pero en su declaración preparatoria deja ver que por su estado de intoxicación no midió la consecuencia de sus actos y se excedió al grado de cometer el asesinato.
Antonio Luna Carrillo, de 28 años, ex agente de seguridad privada, narró su versión de los hechos donde le quitó la vida a José Morales Domínguez, de 30 años el pasado lunes 17, luego de contratar sus servicios para una viaje al oriente de la ciudad.
El inculpado dijo que todo el día estuvo tomando cerveza y vive en la colonia Carmen Romano, pero como ya se sentía mal tomó un taxi y lo fue guiando hasta la colonia Real del Sol II.
Al llegar a la que creía era su casa, el pasajero le dijo al chofer que no tenía dinero, pero que le iba a pedir a su novia para lo cual bajó del vehículo y empezó a tocar la puerta en el número 8820. De la casa nadie atendía y ante la insistencia una voz desde adentro le decía que estaba equivocado, que esa no era su casa.
Antonio no se retiró y siguió tocando ahora por la ventana, para entonces el chofer bajó del auto y se puso a un lado de su cliente para exigirle el dinero, ya que era claro que no estaban en su domicilio. Antonio se molestó por la exigencia y le dio un empujón a José, quien a su vez lo regresó, pero fue sorprendido con un puñetazo que lo dejó en el suelo, convulsionando.
No conforme con el tremendo golpe, Antonio regresó al taxi y tomó la llave en forma de “L” con la que empezó a golpear a José hasta que ya no tuvo movimiento su cuerpo. Luego se regresó al carro y abrió las cuatro puertas y estrelló los vidrios y causó daños al chasis con la misma llave.
Al final Antonio trató de arrastrar a José a la banqueta, pero lo dejó en la calle, para ese momento vecinos ya habían alertado al Servicio de Emergencias del 066 y agentes de Seguridad Pública llegaron a tiempo para la detención del sujeto y solicitaron paramédicos de la Cruz Roja quienes al llegar informaron que no había nada más por hacer.
Ahora Luna Carrillo enfrenta desde el Cereso local el proceso penal 284/2008 en el Juzgado Cuarto a cargo de Pedro Limón Hernández y solicitó la duplicidad del término constitucional. El delito es de homicidio calificado por brutal ferocidad y alevosía.
