Los productores de frijol recuerdan cuando Conasupo pagaba la cosecha a tres días del acopio; hoy son muy pocas las empresas que liquidan al contado, por lo que deben esperar ocho días, pero hay hasta quienes esperan meses.
Por el momento solamente se escuchan rumores de algunos campesinos que tienen varios días esperando su liquidación, pero en su mayoría las empresas acopiadoras cumplen en tiempo y forma, según José Antonio Herrera Ramírez, productor de frijol, originario del ejido Ignacio Ramírez.
Comentó que hasta el momento no se han presentado problemas en el pago por la venta de frijol, por lo menos en uno de los centros de acopio establecido en la cabecera municipal.
HAY FALLAS
Sin embargo, a decir del entrevistado, son varias las personas -aunque no precisó el número- que se quejan de problemas con el pago del frijol, pues a veces sobrepasa el límite de los ocho días establecidos por el Gobierno. Se tardan, pero pagan.
José Antonio, quien tiene sembrando la tierra desde hace 35 años, dijo que en el tiempo que lleva de campesino no se había dado el caso de que pagaran la cosecha al siguiente día como lo están haciendo algunas de las empresas acopiadoras de la región; sólo se puede comparar cuando vendían a Conasupo, que liquidaba la cosecha al tercer día.
Respecto del precio de la leguminosa, destacó que es bueno, aunque sólo una determinada cantidad de lo cosechado que se encuentra en el Programa de Maíz y Frijol (Promaf) la pagan a ocho pesos; la variedad del Pinto Saltillo, en este caso sólo diez toneladas de las 100 que logró levantar, se las pagarán a ese precio, según comentó el productor. “Lo demás lo he vendido a 6.50 o siete pesos para salir de las deudas contraídas durante el año”.
