Uno de los mayores edificios del mundo, el “Taipei 101” lució ayer con fuegos artificiales al dar la bienvenida al año 2008 en Taipei, Taiwán. Una escultura de arena realizada por el artista sudarshan pattnaik para recibir el Año Nuevo, se aprecia en la playa de Puri, India. Las tradicionales campanadas de la Puerta del Sol de Madrid, que cada Nochevieja dan la bienvenida al Año Nuevo, sonaron ayer en España. (Fotografías de EFE)
AGENCIAS
MOSCÚ, RUSIA.- Los guardias fronterizos rusos fueron los primeros habitantes de la Tierra en dar la bienvenida ayer al año 2008 a las 12:00 GMT en la isla de Ratmánov, en el estrecho de Béring, que separa el extremo nororiental de Rusia de Alaska.
La isla de Ratmánov está situada a sólo cuatro kilómetros de la isla estadounidense de Gran Diamid y exactamente a 180 grados de longitud del meridiano de Greenwich, informaron las agencias rusas.
Los soldados rusos y los pescadores que faenan en esta zona son, día tras día, los primeros habitantes del planeta en pasar página al calendario.
Casi a la misma hora, recibieron el año 2008 los habitantes de la ciudad más oriental del país, Petropavlovsk-Kamchatski, capital de la península de Kamchatka, separada de Alaska por el archipiélago de las Aleutianas. Varios miles de personas se congregaron en la plaza central de la ciudad para recibir el Año Nuevo frente a un árbol de Navidad.
Los últimos rusos en celebrar la fiesta de Año Nuevo serán los habitantes de Kaliningrado, enclave situado a orillas del Mar Báltico, y separado del resto del país por Polonia y Lituania.
Según los husos horarios, los rusos esparcidos por una superficie de 17 millones 75 mil 400 kilómetros cuadrados reciben el año 2008 en once ocasiones.
Rusia comenzó a celebrar el Año Nuevo el 31 de diciembre a partir del año 1700, cuando el zar Pedro el Grande decretó que toda la población celebrara la Nochevieja y saludara el cambio de año como el resto de los europeos.
Por otro lado, Australia y Nueva Zelandia siguieron a Rusia en recibir el año 2008 en medio de espectaculares juegos pirotécnicos y estrictas medidas de seguridad.
En Sydney, alrededor de un millón de personas se congregaron frente a la costa o a bordo de tres mil botes en el puerto para presenciar el espectáculo de pirotecnia, denominado “El tiempo de nuestras vidas”, el cual comprendió más de 20 mil fuegos artificiales.
Según Wayne Harrison, director creativo del espectáculo australiano, algunos espectadores acamparon desde las primeras horas de ayer para apartar los mejores lugares en el Puerto de Sidney para figurar entre los primeros habitantes en recibir el Año Nuevo.
En Nueva Zelandia, las autoridades implementaron importantes operativos de seguridad y facilidades de transporte en la mayoría de sus estados para asegurar la celebración, en especial en Auckland, la ciudad más grande de ese país, según reportes de prensa.
Japón, que recibió el nuevo año dos horas después que Australia, celebró la llegada de 2008 de una forma diferente a otras grandes ciudades, pues sus calles permanecieron desiertas y la mayoría de sus restaurantes y negocios cerraron sus puertas.
Sin embargo, los templos de Tokio se llenaron de visitantes, pues el concepto de la ciudad es dar la bienvenida al Año Nuevo de la manera más sagrada posible, ya que consideran el primer día del año como el más limpio.
Las tres mayores compañías de telefonía celular instaron a sus clientes a evitar los llamados o los mensajes de felicitación en las dos primeras horas de 2008 para evitar el congestionamiento en el sistema.
Por su parte, los italianos recibieron el año nuevo 2008 entre la tradicional “quema del viejo”, enormes muñecos rellenos de pirotecnia, platos de lentejas para la suerte y conciertos multitudinarios en diversas ciudades del país.
El espectáculo más importante se llevó a cabo en la central localidad de Rimini, al oeste del país, donde se realizó un multitudinario concierto.