Stewart ofrece lo que exige
Una lenta y una rápida. Así son los conciertos de Rod Stewart: primero Father and Son y luego Have you Ever Seen the Rain? Primero Young Turks (en la que aprovecha para pegarse en las pompas como si fuera una batería) y luego You re in my Heart (en la que hace un homenaje al Celtic Football Club con imágenes de sus mejores goles en la pantalla del Auditorio Nacional) .
Todo es equilibrio en este rockero. No hay excesos. Por supuesto, el cantante ofrece lo que exige: perfección. Su banda suena limpia, impecable, irreprochable. Es tal y como se escucha en los discos. Hasta su voz conserva el tono de los años 60. Ya no es el mismo poder pero es suficiente para alentar la ilusión de los rocanroleros que llenaron el foro la noche del sábado para el primero de dos conciertos.
El mismo concierto es un disco, un LP de acetato. Y en la portada dice: “Rod Stewart, los grandes éxitos que siempre quisiste escuchar en un solo disco”. Abajo, una leyenda escrita con letras en rojo: “Incluye: ‘Da ya think I’m sexy?’, y el cover de Creedence Clearwater Revival “Proud Merry” interpretado por sus coristas”.
El lado A de este disco es mesurado; muestra al Rod Stewart maduro y sensible que tiene su punto más emotivo en la interpretación de Father and Son, que incluyó la proyección de algunas imágenes en las que efectivamente hace una memoria de la partida de su padre. El lado A termina con Sailing y en seguida la aguja del tocadiscos llega al tope y regresa a descansar sobre el brazo en espera de que volteen el disco.
Vestido con chamarra de cuero negra salpicada con brillos plateados, interpretó Sweet Little Rock and Roller.
El final ocurrió con el éxito anunciado en la portada Da ya Think I’m Sexy y, sin más, la aguja llegó al tope y regresó al brazo de la tornamesa en espera del concierto del siguiente día. La calcomanía del centro del LP es el escudo del Celtic Football Club.