COLEGIO DE CIRUJANOS DENTSTAS DE LA LAGUANA A.C.
FILIAL A LA ASOCIACIÓN DENTAL MEXICANA FEDERACIÓN
Stress es una palabra que viene del viejo francés “estrecce” que se traduce como angostamiento y se define como “la respuesta de nuestro organismo ante cualquier situación dada en nuestra vida diaria”.
Todos los días se nos advierte del peligro potencial del stress, diciéndosenos que puede ser el responsable de presión alta o baja, de pérdida del apetito o de comer demasiado; de fatiga, de hiperactividad, de escalofríos o de fiebres. Sabemos que bajo el stress somos personas susceptibles a infecciones, depresiones, accidentes, virosis, resfriados ataques al corazón y en algunos casos, hasta cáncer y envejecimiento prematuro.
El destino, la fatalidad o la suerte, no son la razón de las enfermedades. Una mayoría de ellas, importantes o menos importantes, tienen sus orígenes en la inactividad, en un estilo de vida con hábitos inadecuados, y en no desarrollar y seguir un programa completo y bien balanceado de salud y acondicionamiento físico-mental.
Se dice que una forma de predecir nuestra salud física y psicológica es la de darnos cuenta de cómo reaccionamos ante las circunstancias de la vida diaria. El stress causado puede ser: positivo o negativo dependiente a si reaccionamos ante las circunstancias que afrontamos como un reto y no como una amenaza.
La insatisfacción, es una energía que bien canalizada colabora en la búsqueda del interior y nos insta a hallar el modo de completarnos interiormente.
El Zen dice “No hay camino a la felicidad, la felicidad es el camino”: El máximo anhelo, “El poder de liberarse y hallar la paz interior” como única y verdadera felicidad en un mundo donde todo es transitorio e insustancial.
La filosofía hinduista utiliza los darsanas, que quiere decir “punto de vista” o escuela filosófica, es decir, un punto de vista e interpretación de la última realidad, el mundo y el ser humano. Hay seis darsanas tradicionales; la más conocida el yoga ésta es eminentemente práctico y otras más teóricas que proponen la superación mediante la sabiduría discriminativa en la enseñanza metafísica. Los darsanas son el instrumento como apoyo para desarrollar conocimiento ya que la ignorancia impide vernos y sentirnos como realmente somos. La persona identifica el Yo con sus pensamientos, zozobras, actividades mentales y somáticas, deseos y aversiones.
La ignorancia “metafísica” origina esta identificación mecánica y el individuo atribuye a su Sí-mismo espiritual; los pensamientos, los deseos, las emociones, las sensaciones y los actos. Cuando en realidad, y más allá del órgano psico-mental , está el testigo o Sí-Mismo. Esta identificación del Sí-Mismo con las actividades psicofísicas, son la fuente de dolor.
La materia y espíritu diametralmente diferentes, se asocian por motivos o causas insondables y la persona tiene que lograr la emancipación para lograr que ambas recobren plena independencia. Para ello se requiere una extraordinaria sabiduría en la identificación de espíritu y materia.
“El conocimiento se obtiene al estudiar las cosas por separado y la sabiduría se adquiere al unir los conocimientos”.
El manejo del stress va más allá de la tradicional medicina preventiva o educación de la salud; involucra aprender sobre nosotros mismos, entender el porqué tendemos a manejarnos de determinada manera y a tomar las decisiones que tomamos. Debemos revisar una gran cantidad de actitudes físicas, emocionales, mentales, sociales, espirituales, etc. Y entonces emprender una serie de pasos o actitudes personales con el objeto de mejorar nuestro total bienestar. Para lograrlo, debemos poner en práctica las conductas apropiadas físico-espirituales.
En la búsqueda de la excelencia en la salud y la condición física debemos adoptar rutinas como parte de un programa diario, un ejemplo de puntos a considerar es el denominado círculo áureo o dorado el cual establece siete pasos:
1.- Manejo del stress: que a su vez tiene su propio círculo áureo.
a.- Estar alerta del momento presente y saber relajarse
b.- El adecuado manejo del tiempo.
c.- Una secuencia para obtener calma instantánea.
d.- Descanso óptimo al dormir.
e.- Habilidad para escuchar y comunicarnos.
f.- Rejuvenecimiento a base de rutinas de movimiento.
2.- Opciones de ejercicio.
3.- Bienestar nutricional.
4.- Control de la grasa del cuerpo.
5.- Vitalidad postural.
6.- Diseño del medio ambiente que vivimos.
7.- La unión ilimitada entre mente y vida.
A su vez cada uno de éstos tiene su propio círculo, puesto que no es posible alimentarnos adecuadamente y no hacer ejercicio, o hacer ejercicio y olvidarnos del manejo del stress; o el aprender a relajarnos sin tomar en cuenta las buenas posturas, o sentarnos muy derechos pero tener nuestra mente llena de pensamientos negativos, o reducir grasa de cualquier parte de nuestro organismo con sólo una dieta. Es decir, que es muy importante entender lo íntimamente vinculados que están estos pasos, razón por lo cual forman un círculo dorado.
“Ningún hombre es libre si no es dueño de sí mismo”.
El trabajo exterior se vuelve trabajo interior, la vida cotidiana y sus afanes se tornan instrumento liberatorio.
Realizar ejercicio físico de manera regular nos beneficia en el manejo del stress, sin embargo es importante encontrar la modalidad y/o vincular nuestro círculo dorado para que nos permita despertar la conciencia, el cultivo metódico y armónico de la atención y la liberación de energías atascadas; con intención de la limpieza del subconsciente y la superación de los condicionamientos evolutivos y psicológicos.
“Nada puede aportarnos paz, salvo nosotros mismos”.