Hay que darle tiempo al tiempo
La Selección Mexicana le ganó anoche a Ecuador, en lo que fue el séptimo partido dirigido por Sven Goran Eriksson, el Tri apenas está dando tintes del futbol que quiere que juegue su flamante técnico ya que la próxima semana estarán disputando un compromiso muy importante ante Honduras.
El sueco no se preocupa y sabe que para que la escuadra comience a funcionar se necesita tiempo y preparación, que llega a un proceso que fue iniciado con Hugo Sánchez y que ahora le toca terminar y también confía en que se consiga la calificación al Mundial de Sudáfrica. Pero en México se desconoce de procesos y se esperan resultados inmediatos, y dada la fama y renombre de Sven se esperaría que la Selección en apenas dos meses de trabajo ya jugara como alguna potencia europea.
Pero para que esto suceda se requiere planeación y tiempo, sobre todo tiempo. Un caso excepcional, para poner un ejemplo, es el de Sir Alex Ferguson entrenador de Manchester United. Ferguson dirige a los Diablos Rojos desde hace más de 20 años, llegó al club en 1986 precedido por una buena reputación como técnico en su natal Escocia, recibió al club con problemas de descenso, algunos de sus jugadores tenían problemas con el alcohol y el equipo no se encontraba con las excelentes finanzas con las que cuenta actualmente. No fue sino hasta 1991, cinco años después, cuando consiguió su primer título con el ManU. A partir de entonces los éxitos cayeron por racimos y el Manchester lleva más de una década siendo uno de los mejores clubes del orbe. Este proyecto fue posible gracias a que en esos primeros años se confió en el proyecto del escocés, se le dio la confianza para consolidarlo y no se le exigieron de inmediato uno o dos títulos, como suele suceder en México.
Cómo saber de continuidad y planes a largo plazo en México cuando en menos de un año se disputan dos torneos cortos con liguilla, apenas se está saboreando un campeonato cuando ya se está entrando a la liguilla del otro, si es que se entra, además de jugar los torneos Interliga, Superliga, Copa Libertadores, Copa Sudamericana, “Concachampions” y todo esto con una muy mala calendarización, la muestra la podremos ver la próxima semana cuando Chivas juegue el partido de vuelta de la Copa Sudamericana y sin seleccionados ya que también el Tri juega el próximo 19 de noviembre, además, si califica, estará jugando la liguilla. Y le sumamos la propuesta de la FMF: si Pachuca califica a la liguilla, ésta se juega tal como está planeado, para que al concluir el campeonato los Tuzos puedan asistir al Mundial de Clubes, de lo contrario la liguilla se aplazará una semana.
Mientras se siga trabajando para sobrevivir cada torneo y no se lleve a cabo una buena planeación en donde deben estar involucrados afición, jugadores, directivos y federativos, el futbol mexicano no saldrá del bajo nivel en donde se encuentra, ni a nivel de clubes ni de selecciones.
