El futbolista sufrió hace dos semanas un infarto cerebral, en el hemisferio derecho, del cual los especialistas, hasta hoy, desconocen la causa.
La fortaleza física y anímica, además de la atención médica especializada y oportuna, tienen a Carlos Sánchez, defensa central de América, en una evolución favorable, sin embargo, padece severa parálisis del lado izquierdo de su cuerpo.
El futbolista sufrió hace dos semanas un infarto cerebral, en el hemisferio derecho, del cual los especialistas, hasta hoy, desconocen la causa.
El galeno Juan Nader dio una conferencia de prensa en la que estuvo acompañado por Roberto Corona, neuroradiólogo, y Oscar Juárez, neurocirujano, con quienes ha trabajado, además de otro tipo de personas, en la recuperación del jugador.
También estuvo Yon de Luisa, vicepresidente del club América, así como Yolanda y Benjamín, padres del futbolista.
"La fortaleza física de Carlos ha sido indispensable para llegar a este punto (terapia intermedia), la fase más aguda y grave la hemos pasado", expresó Nader.
El objetivo ahora de los especialistas es recuperar la mayor cantidad de cerebro afectado, a través de técnicas que se han desarrollado últimamente, para que la parálisis no sea tan elevada.
"La hinchazón cerebral que era nuestra mayor preocupación ya pasó de ser crítica", declaró el galeno con la confianza de que la misma disminuirá favorablemente.
Destacó que ahora se está en segunda fase que es la de ayudar a Carlos a recuperar fuerzas porque, mencionó en sentido figurado, "jugó un gran partido y está muy débil. Su vida estuvo en peligro en más de una ocasión y ha superado las pruebas".
Sin embargo, el doctor observó que "todavía no podemos cantar victoria, pues depende del cuidado de la enfermera y médico especializados, de los monitores para ver su frecuencia cardiaca y la capacidad de su pulmón para oxigenar la sangre".
Informó que ahora se va a desarrollar un trabajo fuerte y difícil que la rehabilitación física porque "él tiene una severa parálisis del lado izquierdo de su cuerpo, del brazo y de la pierna.
Deseamos recuperar el 50 o 60 por ciento de la función motora".
Nader resaltó que también hay cosas buenas en su informe, como el hecho de tener comunicación con el futbolista, aunque es limitada porque no tiene mucha energía para hablar, pero entiende al 100 por 100 lo que los médicos le dicen.
"Cuando habla dice cosas congruentes y coherentes", dijo el médico, por lo que es una prueba de que las funciones del habla están reservadas y del entendimiento también.
Uno de los objetivos de los especialistas es ahora estudiar minuciosamente el cuerpo del futbolista para encontrar la causa que le originó el derrame cerebral, ya que hasta hoy desconocen el motivo.