Por más de 35 años, Rosa María Torres, vecina del ejido San Agustín, esperó la pavimentación en su comunidad. El servicio llegó, pero a medias.
La cordonería fue lo único que llegó a esta comunidad, “pues los trabajos de pavimentación un buen día se suspendieron sin darnos explicaciones”, cuenta la mujer.
Pero la falta de pavimento en sus calles, no es lo único que preocupa a las madres de familia, sino también la falta de alumbrado público, seguridad, pero sobre todo la presencia de malvivientes.
Antonia, vecina y madre de familia, por su parte cuenta que por las noches, las calles se transforman en una “boca de lobo”, “pues las luminarias a veces funcionan y otros tantos días no”, dice la mujer, quien prefiere no salir de casa por las noches.
Y es que, asegura, una vez que ha caído el sol, los “malvivientes” como les llama, salen apoderándose de las calles.
“El problema más que nada son los fines de semana, cuando hay más borrachos y peleas en las calles”, dice preocupada la madre de familia.
A las patrullas de Seguridad Pública, dicen ambas mujeres, sólo se les ve durante el día, “por las noches, cada vez que hay algún problema, tiene uno que hablarles y esperar horas para que lleguen”, dice Antonia.
Pero para Rosa María lo más triste es que una obra que durante más de tres décadas esperó, se haya suspendido sin razón alguna.
“Cuando llegaron las máquinas para pavimentarnos, nos emocionamos mucho, pero eso nos duró sólo unas semanas, pues de pronto dejaron de trabajar sin darnos ninguna explicación”, dice Rosa María.
Sin embargo, ambas mujeres comparten una misma preocupación. “La falta de señalamientos y de topes, pero sobre todo de conciencia de los automovilistas; han convertido a nuestra calle principal, en una verdadera pista de carreras, poniendo en peligro la vida de los pequeños”, comenta Antonia.
Camiones, taxis o autos de uso particular, son los que circulan a muy alta velocidad en este sector, “ya murió un pequeño tras haber sido atropellado por un camión de carga, no queremos que esta historia se repita”, dice Torres.
Razón por la que, pese a contar con algunas boyas de dicha vía, solicitan la colocación de bordos “más grandes”, señalan las madres de familia, “esperando que no tenga que repetirse una tragedia como la del pequeño, para que las autoridades tomen en cuenta nuestro llamado”.
Para saber
Vecinos del ejido San Agustín, solicitan:
- La conclusión de los trabajos de pavimentación.
- Rondines de vigilancia por las noches.
- La reparación de las lámparas.
- La colocación de bordos sobre su calle principal.
