Los agentes policiacos ponen especial atención a los vehículos del servicio público por la incidencia de irregularidades.
Tres trabajadores del volante se pasaron de listos; uno de ellos fingió ser asaltado, otro le desapareció el carro al patrón y el tercero se robó 4 mil pesos en compañía de una mujer.
Durango. Diariamente por lo menos un trabajador del volante es detenido por la autoridad por la comisión de diferentes delitos o faltas administrativas, sin incluir los constantes señalamientos que hace la ciudadanía por su mal servicio; ayer la Procuraduría informó que un taxista fingió ser asaltado para desmantelar la unidad, otro se fue y le desapareció el auto al patrón durante seis días y el tercero en complicidad de una sinaloense le robaron cuatro mil pesos a un trasnochador.
Se lesionó para que le creyeran. Un verdadero cuento “chino” fue el que formuló un trabajador del volante para que le creyeran que le habían robado su taxi, inclusive se provocó lesiones y se desgarró la camisa para decir que fue violentamente asaltado.
Édgar Ricardo Vidales Galván, de 20 años, quien se dedica a ruletear un taxi, fue detenido por agentes de la Dirección Estatal de Investigación (DEI) primero por ser sospechoso de falsear una información y posteriormente puesto a disposición del la Dirección de Averiguaciones Previas (DAP) al confesar la comisión del delito.
El reporte de la autoridad señala que Édgar interpuso una denuncia en torno al robo con violencia del vehículo que trabaja, mostrando golpes y su vestimenta desgarrada supuestamente como resultado del atraco.
Tuvo que confesar. Sin embargo, cuando los agentes de la DEI iniciaron la indagatoria descubrieron que la declaración era falsa, pues al parecer el taxista junto con tres sujetos fraguaron tal mentira para desmantelar el vehículo y venderlo por partes y con las ganancias comprar droga.
Los policías “les cayeron” cuando los cuatro se estaban drogando en un domicilio ubicado en calle Isauro Venzor y tras sentirse descubierto no tuvo más remedio que confesar la verdad.
El mencionado comentó que junto con Enrique Alan Ortiz, de 23 años, José Luis López Gallegos, de 53, y Ramiro García Trejo, de 19, se llevaron el vehículo a un terreno y le quitaron el taxímetro, estéreo, bocinas y tomaron el dinero del servicio del día y posteriormente se golpeó el mismo la cara para poner la denuncia y hacer más creíble la farsa.
Se hizo ojo de hormiga. Elementos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública lograron la detención de Gonzalo Banderas García, de 18 años, vecino de la colonia Los Sauces, ya que fue denunciado por Jesús Franco Moreno, dueño del taxi que tenía a su cargo el mencionado, por abuso de confianza pues desde hacía seis días no se presentaba ni a entregarle el dinero de la liquidación ni a reportarse con el auto.
Iba al hotel y fue atracado
Ricardo Flores Favela fue invitado por una mujer originaria de Sinaloa para “echarse” unas bebidas en el interior de un hotel por lo que decidieron tomar un taxi y cuando éste se bajó para pedir la habitación el trabajador del volante y la fémina se fueron con su maletín en el que traía cuatro mil pesos y su teléfono celular, informaron los agentes de la Procuraduría estatal.
Fue a las primeras horas de ayer cuando Ricardo se comunicó con la Policía para decir que había sido objeto de un robo y cuando los uniformados llegaron al hotel donde se suscitó el atraco escucharon la versión de la víctima quien dijo que la fémina lo había interceptado en un centro nocturno, sitio donde minutos después la encontraron con el celular de Ricardo pero el dinero ya lo había gastado.
Finalmente la mujer aseguró que el taxista no participó en el delito, sin embargo los investigadores presumen que ésta lo niega para defenderlo.
Cifras
Taxista se vieron involucrados en la comisión de diferentes delitos, dos de ellos ya están tras las rejas y uno sigue prófugo de la justicia.
Mil pesos fue el monto del dinero que un taxista y una mujer originaria de Sinaloa le robaron a un sujeto en un hotel de paso.
Datos.
Incidencia. Diariamente por lo menos un taxista es sorprendido por agentes de seguridad por la comisión de alguna falta.
Falacia. Un trabajador del volante argumentó que lo habían golpeado para robarle su vehículo pero se comprobó que todo fue mentira.
Abusivo. Después de seis días de haberse llevado el taxi de su patrón dizque para trabajarlo fue detenido por abuso de confianza.
Prófugo. Hasta el momento no se ha logrado saber la identidad del taxista que presuntamente está implicado en un robo de cuatro mil pesos.
Drogadicción. En repetidas ocasiones se ha presumido que algunos taxistas usan sus vehículos para comercializar droga al menudeo.