Momento en que la mañana del lunes 8 de septiembre, los policías federales sometieron a los municipales luego de un enfrentamiento que tuvieron en el ejido San Miguel.
El ex director de la Policía de Torreón habla a una semana del altercado con agentes federales y explica la situación.
Alfredo Castellanos Castro, director general de Seguridad Pública de Torreón habla para El Siglo de Torreón, una semana después de la balacera entre policías federales y municipales y ante el desprestigio que esto ocasionó para la corporación policiaca a nivel nacional.
Respecto a la pasividad detectada en la grabación donde le informan de su central sobre la detención de una patrulla y su traslado a San Miguel, Castellanos dice que en una semana, en promedio recibía de 5 a 6 llamadas relacionadas con la intervención de agentes federales para con sus patrulleros, por eso nunca imaginó que la madrugada del lunes 8 de septiembre las cosas se salieran de control.
“A veces detenían a los muchachos para alguna revisión, luego avisaban que les encontraban dos chalecos (antibalas), si traían más armas largas, se presentaban los documentos y se aclaraba la situación. Cosas así, que se arreglaban con una llamada o enviando a un comandante a conocer de los hechos. Con lo de San Miguel actuamos igual”, dice.
Ante situaciones de detención, Alfredo Castellanos asegura que él acudía a San Miguel. “Cuando no daban información yo iba personalmente. Cuando estaba el primer comandante de la Policía Federal (en mayo de 2007), iba y despejábamos la duda y se aclaraba todo”.
Alfredo reconoce que no dimensionó la magnitud del problema.
“La primera ocasión pensé que era un problema rutinario, por eso dije: vayan y verifiquen, si hay necesidad de que yo vaya, yo me arranco. Tenía dos días que acababa de salir del hospital”, detalla Castellanos.
Pero a la segunda llamada la reacción fue diferente. “Me dicen que al parecer los estaban balaceando, que los tienen rodeados, yo si me... muchísimo y solicito información del comandante José (García Rodríguez), pero creo que ya estaba detenido. En ese momento, yo me arranco a mi oficina al área del Sicam (066) para juntar a los comandantes para ver de qué se trataba el asunto para informar al alcalde”.
Fue entonces que Castellanos se empezó a dar cuenta del tamaño del incidente.
“Me di cuenta hasta que llego al Centro de Emergencias, me empiezan a dar los reportes los comandantes, algunos agentes que participaron y me empiezan a dar las versiones, empiezo armar más o menos el problema de cómo había estado”, dice Castellanos.
Sobre su separación del cargo dice que primero platicó con el alcalde José Ángel Pérez Hernández en la mañana muy temprano y después platicó con él en la tarde. “Me indica que por necesidad del problema y por situaciones para que se lleven precisamente a cabo las investigaciones... le digo que me separe del cargo para que se hagan de la mejor forma posible y me quedo desligado de la corporación por un ordenamiento de él, ustedes lo saben en la conferencia y automáticamente yo me voy a reposar la operación que tengo, que fue delicada y apenas a este momento me estoy recuperando de la operación”.
Casi 12 horas después del altercado en San Miguel, agentes federales irrumpieron en el edificio de Seguridad Pública y con un despliegue excesivo se llevaron a seis comandantes y dos oficiales a la Procuraduría General de la República. En menos de 5 horas todos fueron liberados, después se supo que eran requeridos como presentados o testigos. Extraoficialmente se supo que la lista incluía a 15 personas, entre las que podrían figurar el director interino Fernando Sáinz y el propio Alfredo Castellanos.
Ante la posibilidad de que Castellanos sea requerido por el Ministerio Público de la Federación en relación al caso de los 35 policías y los cinco civiles detenidos, el ex jefe policiaco dice, “no tengo ningún inconveniente en asistir, pero sí quisiera todas las garantías posibles, realmente, que me dijeran en calidad de qué voy, si como testigo, con una orden de presentación, o si realmente es una orden de aprehensión porque lógicamente a estas alturas, como se manejaron las cosas pues ya dudo realmente de la actuación de las fuerzas federales”.
A sus ex subordinados, Alfredo Castellanos les dice “que tengan fe, confianza y pedirle a las autoridades, en este caso a los jueces federales que están llevando el asunto, que realmente hagan una buena revisión del asunto, porque se está comprobando día con día que realmente el incidente no fue ocasionado por nosotros, ni siquiera había... realmente yo no concibo la magnitud para poder balacear a nuestros elementos, por muy... no hay una justificación bastante grande porque mis elementos aparte, muchos no llevaban armas, muchos no llevaban chalecos y no traían armas largas porque el domingo dimos las instrucciones de hacer una revisión del armamento para poder reasignarlas el lunes, entonces no había arma larga en la calle”.
Policía de carrera por casi 20 años, Alfredo Castellanos duda al responder si cree que pueda volver a su cargo, “Mira la verdad yo.. me es muy difícil decidir, yo que quisiera, pero creo que la decisión la tiene el alcalde, ojalá que estas investigaciones se lleven de la mejor forma y salga la verdad a relucir, que se aclare todo para que se diga que la Policía está limpia del incidente que sufrimos”.