El rescate del Centro Histórico de Torreón comienza a complicarse ante la negativa de los comerciantes ambulantes de las avenidas Hidalgo y Juárez a ser reubicados en las áreas peatonales que proyecta construir el Municipio en las calles Cepeda y Valdés Carrillo.
Esta postura expresada la semana pasada por Tomasa Martínez, secretaria general de la Unión de Comerciantes Fijos y Semifijos, obliga al Municipio a definir una estrategia clara para lograr el rescate del Centro y no convertirse en un rehén de los ambulantes.
Para los dueños de diversas tiendas establecidas en el Centro, el proyecto del Municipio tomaba demasiadas consideraciones a los ambulantes, al construirles pasos peatonales e incluso pagarles nuevos puestos, los cuales tampoco gustaron a los informales, quienes a pesar de que trabajan fuera de la Ley logran imponer sus condiciones a las autoridades.
El Municipio está obligado a agotar el diálogo, aunque experiencias en otras partes del país nos muestran que sólo con el uso de la fuerza pública ha sido posible rescatar las calles del Centro de los ambulantes. Querétaro y el Distrito Federal son algunos ejemplos.
Los ambulantes exigen quedarse donde mismo, incluso mandar hacer sus propios tabaretes que ubicarían sobre las banquetas, lo que sin duda sólo agravaría el problema. Caminar por el Centro de Torreón es una experiencia por demás triste, la basura está por todos lados, los vendedores de discos “piratas” ofrecen su mercancía a todo volumen, además la caminata se convierte en una verdadera carrera de obstáculos.
Urge rescatar el Centro, ésta es una demanda ciudadana que lleva más de diez años. Es cierto, la solución no es sencilla. Sobre todo en un año donde muchas decisiones no se tomarán por miedo al costo político, recordemos que tenemos elecciones en octubre. Sin embargo, el que Torreón tenga un Centro digno no debe estar sujeto a los intereses partidistas.
El Municipio debe definirse, diseñar un plan B, pero sobre todo no debe ceder en su intento de rescatar el Centro. Una demanda que por años ha hecho el grueso de la población y que como consecuencia permitiría reactivar la economía del sector.