EL UNIVERSAL
MÉXICO, DF.- El capital solar no se renueva. “Por ejemplo, está el caso de una persona que en su juventud se asoleó, incluso sin protección, y en apariencia no tuvo consecuencias. Pero si ahora lo hace, la piel ya no se broncea, sino que se irrita, se enrojece y hasta se llena de llagas. Dicha persona agotó su capital solar y, si quiere detener el daño que ya causó a su piel, debe protegerse con los bloqueadores que se adapten mejor a sus necesidades particulares”, indica la entrevistada.
Por cierto, el ejemplo que cita Mireya Palacios refleja la situación de miles de personas en el mundo, quienes en sus primeros años de vida se expusieron indiscriminadamente a los daños solares.
La dermato-oncóloga Rosa María Gutiérrez Vidrio, fundadora del servicio de Dermatología del Centro Dermatológico de Pascua, señala que entre 50% y 80% del daño solar ocurre en la infancia y la adolescencia.
Los daños
Cuando una piel que ya no tiene capital solar se expone a la radiación de este astro, puede sufrir consecuencias estéticas, como el envejecimiento prematuro cutáneo, y médicas, siendo la más grave, el cáncer de piel.
El envejecimiento por acción del sol, llamado fotoenvejecimiento, a diferencia del natural, se caracteriza por llegar antes de tiempo y sus señales son: una piel seca, flácida, gruesa, llena de pecas, con aspecto de pergamino, arrugas profundas, manchas claras y otras oscuras en diferentes partes del cuerpo.
Generalmente, las áreas más dañadas son el rostro, el cuello, el área del escote, los hombros y las manos.
La doctora Rosa María Gutiérrez Vidrio dice al respecto: “Los daños de la radiación UV en la piel consisten en la aparición de un eritema, quemadura ligera que se distingue por el enrojecimiento cutáneo, y que puede llegar a tener efectos similares a los producidos por quemaduras con fuego, de primero o segundo grado y puede devenir cáncer de piel.
“Se estima que para el año 2050 habrá 12 millones de personas con cáncer de piel y 200 mil muertes por esta misma causa sólo en Estados Unidos, por lo que es urgente efectuar una campaña nacional dirigida al público en general”, expresó la doctora.
Prevenir es mejor
“Los laboratorios médicos comprometidos con la salud de las personas decidieron hacer campañas de prevención y fomentar el uso de bloqueadores solares desde la infancia, no sólo para evitar las manchas y el antienvejecimiento prematuro, sino el cáncer. “La mejor forma de prevenir es usar bloqueadores solares adecuados”, insiste la experta.
