MALA DIRECCIÓN
Dicen bien que las buenas y malas rachas de bateo son como las gripas, ya que no se sabe ni cómo llegan ni cuándo van a terminar. De repente el gran héroe de los Rayos de Tampa Bay en los play offs, B.J. Upton, no puede ni comprar un hit y resultó el principal culpable, el “chivo” como lo llamamos en el beisbol, en la primera derrota de los campeones de la Liga Americana ante los Filis de Filadelfia por 3 a 2.
Upton debe haber impuesto un récord, o por lo menos empatado, al batear para dobles matanzas en sus dos primeras apariciones en Serie Mundial. El peor de los dos fue el segundo ya que Rayos tenía la casa llena con un solo out. Una rolita lenta, un elevado al jardín, y habría tenido la carrera del empate en el juego que se decidió por una sola carrera. Pero la pesadilla de Upton no terminó con ese par de dobles plays sino cuando tuvo tiempo para redimirse al acercarse 2-3, tuvo en segunda base la posible carrera del empate ya con dos outs y fue dominado en elevado de faul al que el primera base Ryan Howard hizo muy buena jugada al meter su cuerpo de King Kong en las gradas para quedarse con la pelota gracias a su gran altura.
La peor estrategia corrió a cargo de Joe Maddon, el manager de los Rayos, cuando ya perdiendo 2-0 y con corredor filadelfiano en tercera y un out, jugó con el cuadro abierto, regalando la carrera tres si venía un roletazo. Y es lo que pasó, ya que el panameño Carlos Ruiz conectó una rola por el short para que Filis tuviera su tercera carrera, que sería la de la victoria. De haber ordenado jugar con el cuadro cerrado esa carrera no habría entrado y el juego hubiera estado empatado 2-2 en nueve entradas.
Un jonrón de dos carreras de Chase Utley en la primera entrada puso adelante al Filadelfia, que ya no perdió la ventaja y superó también el tremendo ruido que armaron los aficionados de Florida con sus gritos y cencerros. A pesar de la derrota los Rayos continuaron con su racha jonronera en los play offs y ahora fue Carl Crawford el que dio de vuelta entera.
