Obregón contra una jetatura de siempre
Yaquis de Ciudad Obregón salió finalmente como favorito en los playoffs del Pacífico y hay esperazas que este equipo que lleva 27 años sin ganar el campeonato pueda finalmente alcanzar la corona y quitarse la jetatura, el maleficio.
Homar Rojas es el manager y también está tratando de quitarse el “zapato” ya que a pesar de ganar nominaciones de “manager del año” todavía no conquista un campeonato ni en verano con los Guerreros de Oaxaca ni en invierno con los Yaquis.
En 1981 el equipo de Obregón ganó el que ha sido su último título y entonces el manager lo fue un Lee Sigman quien actualmente es buscador de los Yanquis de Nueva York que en años pasados estuvo manejando al Tigres en la Liga Mexicana para luego ser buscador de la Academia de El Carmen, Nuevo León.
En aquel febrero de 1981 se suspendió la Serie del Caribe al no asistir el equipo de Venezuela por un problema de los directivos con la revoltosa unión de jugadores.
También en febrero de 1981 el joven pitcher zurdo mexicano Fernando Valenzuela se reportó al campo de entrenamiento de los Dodgers de Los Angeles después de haber terminado lanzando muy bien como relevista al final de la campaña anterior.
Así que usted ya se puede imaginar: terminaron las largas y triunfales carreras de Valenzuela y de Vinicio Castilla y durante todo ese tiempo los Yaquis de Ciudad Obregón no han podido ganar un solo campeonato.
La única ocasión que Obregón estuvo en una Serie del Caribe fue cuando ganó la campaña de 1973 con el norteamericano Dave García de manager, aunque en aquel clásico celebrado en Venezuela solamente ganaron un juego que fue sobre el favorito y poderoso team anfitrión. Dave García fue manager en Grandes Ligas con Padres de San Diego, Angeles de California y los Indios de Cleveland y lo vimos en sus primeros años de timonel en la vieja Liga Invernal Veracruzana con los Chileros de Jalapa.
Su primero de los tres campeonatos que tienen en la nueva liga del Pacífico lo lograron en 1966 con Manuel Magallón de manager y en la vieja Costa nuca conquistaron una corona. Una pobre cosecha.
