La Coparmex reflexiona que la filmación de películas beneficia principalmente a los hoteles y restaurantes.
Francisco Quiñones Gallegos pide que se detonen lugares cinematográficos
El Siglo de Durango
La industria cinematográfica no es una fuente permanente de empleos, sin embargo, es importante detonar este aspecto en Durango principalmente por la proyección que brinda al estado, indica Francisco Quiñones Gallegos, presidente de la Coparmex.
El Presidente del Centro Empresarial Durango (Coparmex) diserta que se debe trabajar para atraer más producciones cinematográficas, de modo que se pueda recuperar el “boom” que alguna vez se tuvo con la filmación de películas western.
El líder de la iniciativa privada en la entidad señala que en la actualidad los más beneficiados cuando llegan las producciones son el sector hotelero y el restaurantero.
BALANCE
En cuanto a la generación de fuentes de empleo, puntualiza que si bien es cierto se contratan a muchos extras y personal técnico de apoyo, estos trabajos son intermitentes pero es innegable que ayudan a generar mayor circulación de capital.
Manifiesta que gran parte de las personas que participan en las películas vienen de México y son especialistas en ciertas áreas.
“Es muy positivo que vengan las películas porque los hoteles tienen buena ocupación, todas las personas que llegan pues hacen uso de los restaurantes. Nosotros como empresarios pedimos que las autoridades refuercen su coordinación para atraer nuevas producciones”, dice el entrevistado.
SOLICITUD
Lo que lamenta Quiñones Gallegos es que ante la falta de visión de gobiernos pasados, lugares tales como Chupaderos y Ventanas hayan perdido el esplendor que tuvieron antaño y que ahora están desaprovechados.
Su petición es que se hagan las acciones pertinentes para que se recuperen estos espacios y se instalen parques temáticos similares a los que existen en Villas de Oeste. “Esperamos que haya una directiva para que se logre otra vez el arraigo del cine en Durango, que sin duda, es un impulso para el desarrollo económico del estado”, concluye.
