La muerte de Gabriela Yoselín a manos de sujetos armados, no es la primera pérdida de la familia Ruiz Vaquera. hace dos años, tres meses y 20 días, Nadia Elizabeth, hermana de Gabriela, perdió la vida al ser atropellada por un camión materialista.
La tragedia sigue a la familia Ruiz Vaquera. La muerte de Gabriela Yoselín a manos de sujetos armados no es la primera pérdida que tiene la familia. Hace dos años, tres meses y 20 días, Nadia Elizabeth, hermana de Gabriela, perdió la vida al ser atropellada por un camión materialista cerca de su casa.
Gabriela es la joven de 18 años que fue ejecutada junto a su novio Edgar Jair Sánchez Ortiz, de 17 años, también cerca de su casa de donde ambos fueron privados de la libertad la noche del lunes 15 de diciembre del presente año.
Para el jefe de la familia, Juan Dagoberto Ruiz Uribe, de 39 años, la noticia sobre el asesinato de su hija era demasiado dolorosa, y más aún porque estaba obligado a decirle a su esposa, quien todavía no se reponía de la muerte de Nadia el pasado 27 de agosto de 2006.
Todavía estaba en la memoria la muerte de Nadia Elizabeth donde participó un chofer materialista de 35 años, que según el certificado médico estaba ebrio cuando embistió la motocicleta en la que iba Nadia y una menor de 10 años, que al parecer era familiar.
El fatal accidente ocurrió en el bulevar Laguna y la calle Clavel del Moro, aproximadamente a 700 metros de su casa. Los hechos se suscitaron cuando la conductora de la motoneta hizo una parada momentánea y el camión materialista no detuvo su marcha.
Mientras tanto en la agencia del Ministerio Público de delitos contra la Vida y la Salud de las Personas siguen con las indagatorias para tratar de recabar más elementos en torno al caso donde también perdió la vida Edgar Sánchez, luego de que los dos recibieron un tiro de gracia.
Como se informó en su oportunidad, la Policía Ministerial tomó conocimiento de los hechos y en sus primeras investigaciones se estableció por el dicho de testigos, que la pareja de novios fue interceptada a las 22:40 horas por los tripulantes de un auto Dodge Neón color gris plata con placas de Nuevo León.
Gabriela vivía en la calle Rosa de Castilla número 68 y Edgar Jair tenía su casa en la calle Iberis, ambos en la colonia Las Dalias. Los cuerpos fueron encontrados al sur oriente de Torreón, cerca de la planta de Cementos Mexicanos a menos de 1.5 kilómetros del lugar de la desaparición, en la calle Gasoducto a la altura de la calle Primavera, de la colonia Nueva Merced.