En diferentes eventos tres personas resultaron muertas por atropellamiento, una de ellas era un bebé de un año de edad.
El niño Samuel Sandoval González, de un año de nacido, perdió la vida al ser aplastado por una llanta de un tractor, cuando se encontraba jugando con sus hermanitos y uno de ellos, menor de cinco años, encendió el motor del pesado vehículo suscitándose de esta manera el siniestro, informaron los agentes de la Procuraduría estatal, quienes añadieron que otras dos personas perdieron la vida atropellados en diferentes eventos.
Los hechos se registraron en el poblado Gobernadores, perteneciente a Potreros del Llano, municipio de Indé, cuando Samuel, junto con sus cuatro hermanos con edades que oscilan entre los dos y seis años, se encontraba jugando cerca de un tractor, cuando de pronto uno de los pequeños se subió al vehículo y al percatarse de que las llaves estaban pegadas encendió el motor y la unidad avanzó unos metros, pasándole por encima al mencionado.
El padre del menor, de nombre Juan Sandoval, tomó al menor y lo trasladó de inmediato al Hospital Regional de Santa María de El Oro, sin embargo como el niño estaba muy grave tuvo que ser trasladado al Hospital General de esta ciudad, donde aun y con el esfuerzo de la ciencia médica pereció a causa de traumatismo de tórax y abdomen.
LO PRENSÓ UN TRÁILER
Leonardo Olmos Mata, de 55 años, al circular a bordo de un tráiler por la carretera Gómez Palacio-Ceballos, a la altura del kilómetro 40, se percató que un colega estaba a un costado de la rúa con su camión descompuesto por lo que se bajó y pretendía darle ayuda cuando de pronto la segunda unidad mencionada al parecer accidentalmente hizo un movimiento de reversa y prensó al quincuagenario.
El hijo de Olmos Mata, de nombre también Leonardo, de 29 años, vio cómo su padre perdía la vida al quedar prensado entre ambas unidades y justo cuando pretendía auxiliarlo el otro camionero se dio cuenta de lo sucedido y simplemente se dio a la fuga.
La Procuraduría informó que el occiso tenía su domicilio en el poblado San Cayetano, en San Juan del Río, Querétaro, y el cuerpo fue entregado al mencionado hijo.
Embestido por una camioneta
Pablo Ibarra Castro, de 60 años, quien tenía su domicilio en calle Ávila Camacho, número 915, de la colonia 5 de Mayo en Gómez Palacio, Durango, dejó de existir víctima de conjunto de traumatismos, luego de que fuera brutalmente arrollado por una camioneta Ford, tipo pick up, operada por Roberto Cervantes Ávila, de 27 años, vecino de Ciudad Lerdo.
De acuerdo a los testigos de los hechos, Pablo al ir circulando en su bicicleta se le atravesó a la camioneta y el conductor de la unidad motriz no pudo frenar por lo que lo impactó y lo aventó a una distancia de diez metros, quedando el cuerpo sin vida de manera instantánea, mientras que Cervantes Ávila fue remitido ante la autoridad por el delito de homicidio imprudencial.