El segundo preclasificado Rafael Nadal fue dominado ayer por el sorpresivo francés Jo-Wilfried Tsonga, quien se coló a la final masculina del Abierto de Tenis con una victoria de 6-2, 6-3, 6-2. (Fotografías de AP)
Elimina francés Tsonga a
Rafael Nadal en
semifinales
NOTIMEX
Melbourne, Australia.- El tenista francés Jo-Wilfried Tsonga acabó con las pretensiones del español Rafael Nadal de llegar a su primera final del Abierto de Australia al eliminarlo en semifinales por 6-2, 6-3 y 6-2.
Asimismo, el segundo mejor tenista del orbe no pudo convertirse en el número seis en alcanzar una final de primer “Grande” y de esta manera los únicos españoles que han logrado disputar una final de la cita australiana, la cual se disputa sobre superficie de cemento, son: Juan Gisbert, Andrés Gimeno, Carlos Moyá, Arantxa Sánchez Vicario y Conchita Martínez.
Además Tsonga terminó completamente con la ilusión del español de convertirse en el mejor tenista del orbe, lugar que durante los últimos años ha estado en manos del suizo Roger Federer, quien ya está instalado en las semifinales.
Nadal no fue capaz de lograr ni un ‘break’, pues su rival francés desde el arranque del partido encontró la fórmula para bloquear el tenis del oriundo de Manacor, quien no había cedido ni un solo set en el presente torneo australiano.
El galo, quien antes se impuso al escocés Andy Murray, el francés Richard Gasquet y el ruso Mikhail Youzhny, ahora esperará a su último rival de este torneo, el cual saldrá del encuentro entre Roger Federer y el serbio Novak Djokovic.
Nadal: “No esperaba este nivel ni de Federer
“Estuvo imparable, jugando a este nivel, imposible”, dijo Rafael Nadal sobre su verdugo en las semifinales de Australia, el francés Jo-Wilfried Tsonga, del que no esperaba esa gran actuación.
“No esperaba este nivel ni de Federer”, dijo Nadal, quien admitió haberse sentido impresionado por la potencia de su rival. “Es rápido, explosivo, no es real que cada bola que tocaba fuera a mi revés con esa potencia y con una fuerza no habitual. Algunas de las voleas de su revés fueron increíbles, jugando a ese nivel es difícil pararle y mejor que hoy será difícil que juegue. No puede jugar así siempre”.
Nadal dijo que no estaba frustrado y que tampoco sintió impotencia, pero que apenas pudo hacer cambios. “No he podido entrar en el partido, no me daba tiempo, era todo un pim-pam-pum. Ante eso, uno puede sacar mejor, tirar más fuerte de derecha, pero esto es como una balanza, y cuando un jugador está así, el otro baja. En estos casos lo único que se puede hacer es sacar mejor para que el partido se iguale más.
“Entré con las cosas muy claras pero el partido comenzó mal para mí con aquella rotura inicial. Luego ha sido un cúmulo de circunstancias y no ha sido por falta ni de mi lucha, ni de ideas mías”, prosiguió.
“Hay que saber perder y ganar con humildad, así que lo mejor que pude hacer es felicitarle y seguir adelante, guardar las raquetas y trabajar aún más”, dijo Nadal.
“No es cuestión de suerte que esté en la final después de haber vencido a jugadores como Murray, o Youznhy”, comentó Rafa Nadal al serle preguntado si todo había sido fortuna de Tsonga, “pero creo que va a sentir la presión de su primera final de un Grand Slam”, añadió sobre el partido que tendrá, bien con el serbio Novak Djokovic o contra el suizo Roger Federer.
Un sueño
para Tsonga
El francés Jo-Wilfried Tsonga señaló ayer que durante el partido contra el español Rafael Nadal en el Abierto de Australia había una energía que le empujaba.
“Es un sueño. Me ha gustado todo de mi juego, el revés, el saque, la dejada. He dado lo mejor de mí sobre la pista. Ha sido ridículo”, dijo Tsonga anonadado por el despliegue ayer en la Rod Laver Arena.
“Sentí que había una energía que me empujaba, qué placer, es fabuloso. Quizás he jugado el partido que todo el mundo sueña”, comentó.
Tsonga dijo que su estrategia funcionó en todo momento. “La táctica era no dejarle terreno, montarme sobre la bola y presionarle mucho para que él cometiera errores. Rafael juega el mismo tenis todo el tiempo, su nivel es muy alto y es difícil jugar contra él, pero hoy me entraba todo. El juego de Nadal es hacer fallar a los otros”, dijo.
El jugador francés señaló que tras recuperarse de las lesiones que le han mantenido casi dos años fuera de juego, ahora sentía más placer. “No es que haya vuelto con mayor motivación, pero sí con mayor placer, para estar más feliz con lo que hago. Esto es pasión para mí”, dijo.
Tsonga recordó que todo había sido fruto del trabajo. “Nunca me entrené así en el invierno, nunca practiqué de esa forma y este año lo he hecho y ha funcionado”, comentó.
De ese periodo de lesiones, Tsonga dijo que había esperado recuperarse. “Yo sabía que podía jugar de forma increíble pero mi cuerpo no estaba listo todavía, ahora está preparado y puedo hacerlo”, dijo Tsonga que no tiene preferencias sobre su rival en la final: “los dos son grandes jugadores, y el que llegue estará bien y tendré la oportunidad de poder enfrentarme a uno de ellos”.