Hoy en día Pumas no es en la cancha la fiera de otros tiempos, y requirió de un rechace de Oswaldo Sánchez, al minuto 24, para anotar su único gol. La pelota, regresada al campo de juego por el arquero de Santos, le cayó de regalo a Marco Antonio Palacios, quien anotó.
Y al minuto 38, en un centro de Juan Pablo Rodríguez, Santos empató el partido con testarazo de Vicente Matías Vuoso. El balón estuvo a punto de detenerlo Sergio Bernal pero ya era gol y lo único que hizo el arquero fue enviarlo más adentro.
Fue un partido que inició Santos como es su costumbre, yendo decidido al frente y sorprendiendo al rival, pero Christian Benítez pensó dos veces un disparo que tuvo a modo y se esfumó la primera oportunidad, la segunda la desaprovechó Walter Jiménez.
Luego Pumas, pasada la sorpresa y el susto, empezó a apoderarse del balón y a crear jugadas de peligro, pero esta vez Esteban Solari estuvo bien marcado, lo mismo que Ignacio Scocco, con lo que la eficiencia de los universitarios quedó para mejor ocasión.
Édgar Castillo, que había iniciado enjundioso, sufrió una lesión en su pierna izquierda y tuvo que ser sustituido por Barrera y así las llegadas de Santos por banda izquierda se acabaron y eso fue lamentable, pues ahora el “Homie” hasta perdería su ida a Europa.
Rubén Chávez y Manuel González deberían platicar con Oswaldo para que regrese el menor número de balones a la cancha, pues éstos ya han costado goles, y en la recta final pueden influir para perder partidos. Lo mismo deben hacer con Miguel Becerra.
