Buen partido el de ayer en el Corona, donde Tigres bien plantado y quedándose con 10 hombres en la segunda parte mostró que venía por el triunfo, mientras que Santos Laguna bregó, luchó, a veces se desesperó pero por fin consiguió el empate.
Tigres tomó el control del partido muy pronto, y una y otra vez llegó peligrosamente frente a Oswaldo, pero algunas veces falló gracias a la colocación del arquero santista y otras porque no aprovechó facilidades, pero a los 24 minutos ya estaba adelante con gol de Guillermo Marino.
Ya en la segunda parte Tigres jugó diferente, y más modificó su actuar, pues a los 14 fue expulsado Pedro Benítez por aparente falta a Vicente Matías Vuoso casi dentro del área. Cobró Ludueña, pero como lo hace desde que regresó, estrelló en los rivales.
Así que, totalmente replegado siguió el cuadro universitario, aprovechando solamente las descolgadas que le permitía Santos. En cambio el equipo de la Comarca se dedicó a ir una y otra vez al frente pero Óscar “Conejo” Pérez ofreció grandes actuaciones.
Fue hasta los 30 cuando Fernando Arce prendió de aire un balón y lo mandó a la esquina contraria que cubría el “Conejo” para empatar, ante la alegría general. Siguió atacando Santos pero no logró el siguiente gol que tanto buscó.
Agustín Herrera, que había tenido gran actuación en Guatemala anotando tres goles, fue puesto desde el principio pero nunca se acomodó y no pudo ayudar, entrando a suplirlo Oribe Peralta que se vio mejor. En fin, el empate mete a Santos en el dramatismo de la final del torneo.
