La del miércoles fue una noche de futbol y de tensiones. Empezó la fiesta con el encuentro entre Chivas e Inter de Porto Allegre, y conforme fue transcurriendo el partido las caras se alargaban en el Estadio Jalisco, donde el Rabaño fue vencido 0-2.
Efraín Flores, técnico tapatío, mostraba un rostro muy diferente al sonriente que lucía en la derrota ante el Puebla, confiando en que dejaría sus mejores hombres para recibir a los amazónicos. Ponía toda su fe y confianza en la Sudamericana, despreciando la liga.
Siguió el partido en Cancún entre Potros y Tecos, donde los primeros bailaron a todos los ritmos ante unas aves nocturnas que apenas quisieron despertar cuando ya tenían 3 goles en contra. Ahí Christian “Hobbit” Bermúdez dio cátedra de buen futbol y entrega.
Pudieron ser más goles de los equinos marinos, sólo que andaban tan alegres y contentos por meterse en la calificación que prefirieron dejar algunos para este domingo cuando visiten al Santos Laguna, sabiendo que la presión es ahora para los de la Comarca.
Y para cerrar la noche, nuestra Selección sudó, sufrió y logró finalmente la victoria en tiempo de compensación gracias a la aparición en la delantera de Vicente Matías Vuoso. El “Toro de las Pampas” definió el encuentro y salvó a Sven Goran Eriksson de las críticas.
Seguramente el cuerpo técnico santista observó con atención el partido entre Atlante y Tecos y habrá sacado en conclusión que no será fácil el encuentro de este domingo, por lo que se necesitará de ese extra que deben aportar todos los que merecen el triunfo.