Nosotros Las palabras tienen la palabra VIBREMOS POSITIVO Eventos

Una bebida de bienestar

EL UNIVERSAL

MÉXICO, DF.- Es la bebida asiática por excelencia y toda una costumbre en Inglaterra; para unos, el tomarlo es todo un ritual y para otros simple gusto o afición.

Aunque el té aún no se ha posicionado del todo en México, ya hay lugares del país donde se está convirtiendo en moda. No sólo se toman el té verde o el negro sino que se pueden degustar cientos de mezclas que tienen como base esta planta oriental.

En nuestro país se le suele llamar té a toda hierba, flor, raíz o especia que se hierve para dar sabor a una bebida, lo cual es un error.

“El té sólo puede provenir de una planta llamada camellia sinensis que crece en Asia. Lo que se conoce como té de manzanilla, de canela, de yerbabuena son en realidad infusiones porque no provienen de la planta del té sino de otras, explica Emmanuel León, manager de Maison Francaise de thé, Caravanserai, una tienda especializada en la materia.

Aunque hay una gran variedad de tés, las cuatro principales clasificaciones son el blanco, olong, verde y negro; todos son producto de la misma planta, pero tienen nombres y sabores distintos por el grado de oxidación y de procesos por los que pasan para su elaboración.

El té blanco es el menos procesado, ya que sólo se recolectan las hojas de la planta, se seca y se sirve.

El té verde se retira tras la primera fase de secado de la hojas que después son tostadas, pero sin dejar que éstas se oxiden. Es de color claro, aromático y de sabor astringente, amargo y áspero. El que se prepara en Japón tiene un sabor más vegetal (a espinacas o acelgas), y el chino tiene un toque avellandado.

El té negro toma ese color por el grado de oxidación, pero también de éste hay una gran variedad. En Europa suelen agregarle leche, y saborizarlos con otras hierbas, especias o frutas. El té de olong está entre el verde y el negro, se produce en medio del proceso de fermentación del té negro; se escaldan las hojas y se obtiene un producto especialmente fuerte, elaborado y consumido sólo en China.

Realizar las mezclas de diferentes aromas del té para obtener bebidas de sabor especial es el trabajo de un blender, que usa su fino gusto y desarrollados sentidos para la elaboración de nuevos y deliciosas variedades. Su labor es semejante a la de un perfumista, un catador o un barista.

Un hogar para el té

En la transitada esquina de las calles de Álvaro Obregón y Orizaba, en la colonia Roma, se encuentra Maison Francaise de thé, Caravanserai, uno de los locales de té más famosos del DF.

Debido a la complicada pronunciación del nombre en francés, le llaman simplemente La Casa del Té, en donde se pueden encontrar hasta 120 variedades de la bebida.

La idea de establecer una tienda donde se vende sólo té, y los artefactos para elaborarlo, empezó por la necesidad de tener un sitio exclusivo dónde tomar esta bebida.

Además de una gran variedad de sabores, la decoración seleccionada por Emmanuel Picault dio el toque complementario. El local es agradable y cómodo, la gente disfruta más del té, que es rígido en su preparación, pero necesita un espacio de relajación para beberlo.

Entre los sabores más pedidos por los clientes está el chai con mango, coco, limón y jenjibre. También hay mezclas perfumadas como las de bergamota, menta y jazmín. Todos los tés son importados porque la planta no crece en América.

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 332493

elsiglo.mx