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Una cuesta de enero muy pesada

PERIFÉRICO

Luis Guillermo Hernández

En la semana que terminó, el escándalo suscitado por la filtración de un video que mostraba a los jefes policiacos de Torreón divirtiéndose en una fiesta privada con el espectáculo de una nudista, acaparó la atención de los medios de comunicación locales y nacionales, además de que se convirtió en el tema de plática obligado.

Sin embargo, más allá de este escándalo, otras noticias fueron más contundentes a nivel local ya que afectan directamente el bolsillo de las familias laguneras.

El anuncio del incremento en el precio de la tortilla que pasó de 9 a 10 pesos, nos obligó a situarnos en nuestra realidad y olvidarnos del video que generó morbo y por ende una gran cantidad de navegantes en Internet.

Y es que en lapso de un año el precio de la tortilla en la Comarca Lagunera experimentó un incremento del 11%. Aumento que por desgracia no se puede ver como una “buena noticia” bajo el argumento de que la población será más sana y menos obesa, ya que para mucha gente la tortilla es el único alimento posible de comprar.

En este escenario, ahora será necesario echarle el doble de agua a los frijoles para que rindan, ya que por si fuera poco también nos enteramos que la Comarca Lagunera registró la mayor inflación de todo el país en 2007, al registrar una alza de 5.89 por ciento en el Índice Nacional de Precios al Consumidor, según cifras de 46 zonas metropolitanas publicadas por el Banco de México.

El alza de precios es resultado del incremento en precios que han mostrado alimentos y áreas del sector de vivienda. La nota publicada por El Siglo de Torreón el jueves de 10 de enero informaba que:

“A lo largo del año (2007), esta región ha mostrado incrementos sustanciales en el precio de algunos productos agropecuarios como el tomate y en alimentos como tortilla, leche, carne, pan, así como el encarecimiento de servicios de transporte, salud, educación y la vivienda, según los subíndices del Banco de México”.

De esta forma el inicio de año no se ve nada halagador, ya que para terminar de “amargarnos” la semana el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, ajustó a la baja el pronóstico de crecimiento de la economía para 2008.

El funcionario no dio una cifra específica sobre la nueva previsión, la cual será menor a lo estimado en los criterios de política económica, que pronostican un crecimiento de 3.7 %.

Carstens dijo en una conferencia ofrecida en el Instituto Tecnológico Autónomo de México, que la tasa de 3.3% prevista por analistas del país “es razonable”, aunque hay riesgo de que baje.

Dichas noticias han provocado que la cuesta de enero sea más pesada que otras veces, ya que para el grueso de la población resulta por demás frustrante ver cómo su poder adquisitivo disminuye, mientras la carga de trabajo aumenta. Y es que muchas personas deben tener hasta dos empleos para alcanzar al menos un nivel de vida digno, sin lujos.

El escenario económico actual, nuevamente hace evidente que en Torreón como en el resto del país, por décadas se ha carecido de un proyecto a largo plazo, donde se busque un desarrollo con beneficio económico para el grueso de la población. De esta forma la riqueza se encuentra en pocas manos y no existe un desarrollo sustentable.

Platón afirmaba que la economía es el arte que nos libra de la pobreza, sin embargo, tanto a nivel nacional como local, históricamente las decisiones que han tomado las autoridades en turno han estado alejadas de dicha premisa.

El panorama no se ve nada halagador tomando en cuenta que en 2007 se crearon en Torreón de acuerdo al Segundo Informe de Gobierno del alcalde, José Ángel Pérez, apenas 12 mil nuevos empleos. Todos ellos de la micro y mediana empresa, es decir, a la ciudad no llegan inversiones fuertes con visión a largo plazo. La economía de Torreón depende del sector de servicios.

En el año que terminó, Torreón no atrajo nueva inversión industrial. Los sucesos más importantes en esta materia se han dado con las ampliaciones de plantas ya establecidas, como es John Deere, Montiac, Cableados del Norte, Takata y Delphi.

Según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) la línea de pobreza en 2006 se fijó en 809.87, pesos mensuales por persona para pobreza alimentaria. En Torreón de los 577,477 habitantes que tiene el Municipio, más de 210,000 perciben menos de 1,624 pesos al mes. Esto contrasta notablemente con la vocación de servicios, orientados al consumo de la clase media alta, que se ha desplegado en la última década.

Sobran los motivos para esperar un 2008 difícil, la recesión económica de los Estados Unidos es uno de ellos. Debemos recordar que el estudio “Situación y Perspectivas para la Economía Mundial 2008” de la ONU vinculó de manera más estrecha la desaceleración en Estados Unidos con la economía mexicana y señaló que el país será el más afectado por una recesión estadounidense.

Sin embargo, pareciera que la población es la única preocupada, ya que la clase política mantiene sus lujos y la palabra austeridad sólo la conocen por el diccionario.

El futuro económico no es nada halagador, de ahí que ni siquiera un nuevo video que muestre a funcionarios públicos disfrutando de un show nudista pueda alejarnos el amargo sabor de boca provocado por la escalada de precios y la falta de empleos. Por desgracia, muchos no sufriremos la cuesta de enero sino que experimentaremos la cuesta de 2008.

lharanda@elsiglodetorreon.com.mx

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