Los paramédicos de la Cruz Roja atienden en promedio una veintena de llamadas al día por diferentes tipos de lesiones.
En una de las salas del Hospital General fue atendida una niña de cinco años luego de que se le apreciaran quemaduras de primer grado por electrocución en ambas manitas, luego de que pretendía conectar la televisión pero no contaba con clavija, tenía los cables “pelones”, informaron agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado.
Fue la mañana de ayer cuando la menor Johann Damiana Silva Juárez, de cinco años, quien tiene su domicilio en calle Zinc, número 139, del fraccionamiento La Hacienda del Pedregal, ingresó a una de las salas del Hospital General donde los médicos le apreciaron heridas de primer grado en sus extremidades superiores.
LA DEJARON SOLA
Con relación al reporte que otorgaron los agentes de la Procuraduría, la menor se encontraba en su vivienda y cuando quiso encender la televisión observó que no estaba conectada y como no tenía clavija intentó meter los cables al contacto sin la menor precaución, pues a su edad no comprendía el peligro que manifestaba esa situación, provocándose la descarga de energía eléctrica en sus manitas.
Los gritos de la niña alertaron de inmediato a la madre de ésta, de nombre Ventura Silva, de 42 años, quien la llevó al nosocomio para que la atendieran, pues el llanto de la infante no cesaba.
Los médicos del sanatorio tras realizarle un estudio especial declararon que sólo tenía quemaduras de primer grado en sus manos, situación que no pone en riesgo su vida y no afectó otro órgano ni tejido.
