Profesionales bilingües interesados en ser profesores en Texas deben costear cursos de capacitación,
pasajes y trámites consulares que superan los ocho mil dólares, sin la garantía de obtener el puesto.
¿Te gustaría trabajar en Texas? ¡Claro! Se respondió al ver el anuncio en el periódico y pensó: “Cuento con los requisitos, hablar inglés y un título profesional a nivel licenciatura”. María Luisa llegó a su sesión informativa emocionada, después de cuatro meses de estar desempleada.
En el transcurso de una hora la emoción se desdibujó de su rostro al darse cuenta que además de cumplir con las demandas del empleo debía invertir a lo largo de un año poco más de cinco mil dólares por cursos, trámites y viajes, para sólo obtener una oportunidad de cotizarse ante distritos educativos de Texas, los que hoy demandan maestros bilingües de preescolar hasta cuarto grado de primaria.
Esta es la cuarta oportunidad que María Luisa pierde para ingresar una vez más al mercado laboral. En unas fue rechazada por la edad: 40 años y en otras porque la pretensión de su sueldo era muy elevado. Pero hoy que cumplía con los requisitos, no tiene el dinero para conseguir una oportunidad de cotizarse en Estados Unidos.
María Luisa no pudo ser parte “de los más de mil maestros bilingües que laboran en el estado de Texas”, como decía el anuncio colocado por las Universidades Intercontinental y Regiomontana, instituciones que obtienen una remuneración por capacitar y orientar a profesionistas, para que lleguen a una feria del empleo en febrero próximo a Monterrey donde ellos puedan vender su perfil a uno de los distritos escolares de EU.
Si son aceptados, previo a haber aprobado un examen llamado Texes 103 realizado en Texas, o su similar aplicado en México denominado Texes 101, que los acredita como maestros generales bilingües, podrán obtener un contrato por 10 meses de trabajo, con un sueldo durante ese periodo que oscila entre los 30 mil dólares hasta los 48 mil dólares.
“Además, después de un año de capacitación pagada por mí, para ir a trabajar a Estados Unidos, no me garantizaban que obtendría un trabajo o la visa”, se queja María Luisa.
El programa para contratar maestros es coordinado por Región 4 Education Service Center en Houston, Texas, los que a través de colaboraciones con la Universidad Autónoma de Guadalajara y la Universidad Regiomontana, reclutan y capacitan a los interesados en México desde hace 14 años.
El ingeniero Carlos Anaya Sánchez, representante en la Ciudad de México del Programa Región IV comenta que la UIC es el contacto en el Distrito Federal de la Regiomontana y asegura, que la ganancia que las universidades tienen por cada persona capacitada es modesta.
“Esto es una buena inversión. Quien piensa: ‘Ando buscando trabajo y debo pagar todavía’ es verlo de una forma negativa. Además al cubrir todos los cursos, y en caso dado de no continuar la aplicación para trabajar en Estados Unidos, la Universidad Regiomontana otorga 50% de los créditos de una maestría en administración educativa, como una forma para recuperar la inversión” indica.
Lorena, una de las mexicanas que logró por este medio llegar a Texas para ser maestra reconoce que el obtener este trabajo cumple con sus expectativas de nivel de vida: “Mi hija está más que encantada, cuando llegó se puso a correr en el departamento y a gritar ‘nunca hay que cambiarnos de aquí, aquí me quiero quedar’. Ahorita está en la alberca que es donde ella quisiera estar todo el día”.
No obstante, existe otra opción para ir como maestro a Texas, pues en 2006 la Secretaría de Educación Pública (SEP) firmó un acuerdo con el Distrito Escolar Independiente de Dallas para que maestros bilingües mexicanos sean contratados hasta por tres años en escuelas públicas de esta ciudad.
