Una quinta parte de las personas que no están en el sistema financiero, piensan que las tandas son la única forma que tienen para ahorrar, informó Guillermo Zamarripa, titular de la Unidad de Banca y Ahorro de la Secretaría de Hacienda.
Inclusive, añadió que en los últimos 12 meses, esas personas consideraron que 75 por ciento del crédito que obtuvieron fue por medio de productos informales.
El funcionario dijo que una encuesta realizada por la Secretaría de Hacienda entre mil 600 familias en todo el país que no utilizan el servicio financiero reveló que 85% de ellos no están dispuestos a usar esos servicios y solo 15% consideró que sí buscaría a la banca.
Los que no se interesaron por participar expusieron los siguientes pretextos: No tienen dinero, 22%; los bancos cobran intereses altos, 12%; no le gusta el sistema financiero, 11%; no necesitan de la banca, 7%; no tiene trabajo, 5% y 3% porque piden muchos requisitos.
“Mucha gente no quiere entrar al sector financiero en vehículos de ahorro o de crédito por algún miedo, desconocimiento o por una mala percepción”, sostuvo Zamarripa, en el segundo aniversario de la Sociedad Financiera de Objeto Múltiple en México.
De acuerdo con el sondeo de Hacienda, el sector desatendido de la población encuentra alternativas para cubrir sus necesidades de financiamiento, las cuales son “costosas e inseguras”.
Especificó que para ahorrar, la población sin acceso a servicios financieros, recurre a las siguientes acciones: 22% guarda su dinero en casa; 11% se otorgan préstamos entre conocidos. Para solicitar crédito, 81% que no están en el sector financiero le pide a “sus cuates” o a la familia, 10% pide al patrón, 2% al vecino y 1% al prestamista.
De acuerdo con la encuesta, los que no son usuarios del sistema financiero, 13% tienen preocupación por la claridad de las tasas de interés; 7% mantienen inquietudes de los beneficios que ofrecen los bancos.
Prevén aumento en tasas
El Banco de México (Banxico) anunciará hoy la decisión de la política monetaria, donde la mayoría de los analistas del medio financiero esperarían un mayor restricción, es decir, pronostican un incremento de 0.25 puntos porcentuales para ubicarla en ocho por ciento, ello como una medida preventiva para contrarrestar las futuras presiones inflacionarias.
Es importante señalar que en la pasada reunión, que se celebró el 20 de junio del año en curso, el banco central optó por aumentar la tasa de interés doméstica en 25 puntos base para llevarla a 7.75 por ciento tal situación se derivó de el nivel alcanzado por la inflación general sobre todo la anualizada, pues al mes de junio registró a una tasa de 5.26 por ciento, superando el tope máximo establecido por Banxico de 4.75 por ciento.
Asimismo, los mercados financieros comenzaron a descontar la expectativa de un mayor encarecimiento del costo del dinero, ya que en la pasada subasta de valores del gobierno, los Cetes a plazo de 28 días fueron asignados a una tasa nominal de 8.02%, mientras el tipo de cambio peso-dólar registró un precio de 10.2190 pesos, cotización que no se observaba desde hace cinco años cuando se encontraba en un precio de 10.250 pesos; sin embargo, los títulos de largo plazo no siguieron el mismo comportamiento, toda vez que la emisión a diez años reportó una baja de 0.10 puntos para ubicarse en 8.97 por ciento.
