Las familias que se posesionaron de terrenos delimitados dentro de la colonia Jardines del Oriente y que pertenecen al Instituto Estatal de la Vivienda, consiguieron su propósito: lograron que las autoridades estatales decidieran vendérselos a cinco mil pesos, de los cuales, sólo aportarán cuatro mil y el Municipio el faltante.
Fue el 24 de marzo cuando un nutrido grupo de personas que invadieron dichos predios, se presentó en Presidencia para solicitar el apoyo del Municipio con el fin de adquirirlos legalmente.
Las autoridades municipales en esa ocasión les informaron que eran propiedad del Instituto y se comprometieron a citar a los representantes de dicha dependencia para negociar la compara venta para la solución legal a sus problemas de vivienda.
Lo que sucede es que el Municipio no tiene reservas territoriales, por eso el alcalde Raúl Onofre Contreras les dijo que la única forma de ayudarlos, era apoyarlos con dicha gestión.
De esta manera se convino que cada familia recibirá cien metros cuadrados de terreno cuyo valor es de cinco mil pesos, de los cuales, sólo aportarán cuatro mil y el Municipio el faltante.
El presidente municipal, Raúl Onofre Contreras, asumió de manera pública el compromiso de incorporar a las familias al programa de Piso Firme.
La condición única es que construyan las paredes de sus casas, pues recibirán también dos techos de vivienda por la cantidad de cuatrocientos pesos cada uno.
También ahí, el edil se comprometió con las familias para que en la menor brevedad posible, los lotes cuenten cada uno con los servicios de agua potable, electrificación, pavimentación, drenaje y alcantarillado.