Durante 30 años nunca cambió la bitácora de ventas: cuatro o cinco salas por semana, de material resistente, de ese que dura por generaciones, con ganancias modestas que le permitieron a Ernesto Vidal, mueblero de toda la vida, mantener y darle educación a sus tres hijos por años. Un enero de 2006 un clic les cambió la vida. La idea llegó a la cabeza de uno de sus hijos gemelos. Tomó fotografías de las salas y comedores que vendía su papá y los anunció en www.mercadolibre.com. Hoy, los Vidal están cerrando el año con 160 muebles vendidos por día a través de internet, tienen 32 tiendas en todo el país y un papá que sigue sin creer que la web los hizo ricos.
Como ellos hay 32 millones de usuarios que están vendiendo o comprando algo en páginas como Mercado Libre las 24 horas del día y los 365 días del año. Hoy, los Vidal son parte de un sueño cumplido. Dan pláticas de comercio electrónico en congresos de ventas y pasan la fórmula del éxito sin precaución alguna: “Sólo toma una foto de lo que vendes, súbela a la red y siempre habrá alguien del otro lado que necesite lo que tú tienes y que ya no le guste ir a las tiendas”, dice Ernesto Vidal de 31 años.
En dos años crecieron en todos los aspectos gracias a las ventas online, de un taller de 100 metros pasaron a 3 mil metros cuadrados, todos llenos de muebles que ya tienen dueño. Sus clientes cumplen con un perfil invariable: son menores de 30 años, no gastan más de 15 mil pesos para amueblar su casa y les gustan los muebles de diseño con colores de tendencia, este diciembre, lo más comprado es el morado.
Los hermanos tienen rostro fuera de Mercado Libre e Ingenia.com. Sus nombres, Ernesto y Patrick Vidal. Le ponen carne y hueso a las cifras, pues pertenecen a los 40 mil mexicanos, que según Francisco Ceballos, director general de Mercado Libre México, viven únicamente de vender algo por internet, ¿qué?, casi cualquier cosa.
Las historias son muchas, la de Héctor que vende mil memorias USB al mes, la de Mario que recorre las carreteras de todo el país con 300 salas a la semana, fabricadas en un taller en Guadalajara y negociadas desde una computadora, o Brenda que vende de todo, ahora, arbolitos de Navidad.
El negocio online ha crecido 70% anualmente desde que los mexicanos compran por internet, hace diez años. Las últimas cifras que la Asociación Mexicana de Internet revela constatan que el país cerrará con ganancias de mil 620 millones de dólares de ventas con un clic.
A los Vidal les tocan varios, pero son sólo un eslabón de la cadena que crece todos los días por la red.
A ingenia.com, la página de ventas de muebles de los Vidal, ingresan entre 8 y 10 mil usuarios diarios. Estos jóvenes han revolucionado las ventas por internet de tal forma que ahora chatean por messenger con sus clientes. ¿De qué color quieres tu sillón? ¿En cuánto tiempo lo necesitas? ¿Cuál es tu presupuesto?
Le pensaron mucho para lograr la exitosa empresa que tienen hoy, cómo harían para que los clientes se llevaran un sillón sin verlo más que en la pantalla de su computadora. “A la gente le gusta sentarse en los que serán sus muebles y tocarlos, lo aprendieron de sus papás, así que se nos ocurrió dar la garantía de que si no les gustaba les regresábamos 100% de su dinero y funcionó”, dice Ernesto Vidal, de 31 años y gerente de Ingenia.com.
Sólo les regresan dos de cada 100 pedidos. Ahora tienen una red de fleteros que recorren desde Los Cabos hasta Cancún y 32 tiendas por todo el país, donde la gente aún sigue viendo los muebles primero en internet que físicamente. “El 95% de la gente que llega a comprar a una tienda ya lleva impreso su pedido y lo levantó por internet”, explica Patrick Vidal.
Tienen muchas ventajas, el precio es inmejorable, si se compara con una tienda, hay un contacto directo con los fabricantes, pues por messenger se les puede estar preguntando todo el día a qué hora llega la mudanza con los muebles. Los Vidal ni siquiera contratan especialistas en ventas, porque los mismos usuarios les dicen qué quieren, de qué color, en qué tiempo. “Empezamos de atrás para adelante, no fabricamos nada que no tengamos ya vendido, nuestro catálogo es la red”, dice Patrick.
Pero lo que también empezó como un sueño y ahora es realidad es el portal de Mercado Libre.com. En 1998 existían 16 empresas en México que hacían lo mismo, pero Francisco Ceballos, director del portal, decidió aventurarse, imitar el modelo de IBM.com que ya tenía éxito en Estados Unidos y tropicalizarlo para el país.
“En diez años de no cobrar nada y tener unos cuantos miles de usuarios pasamos a 32 millones y tenemos 5% de comisión por lo vendido”, dice.
Hoy es el mayor sitio de compras y ventas por internet de América Latina donde compradores y vendedores pueden encontrarse, intercambiar información y realizar transacciones de comercio electrónico con una gama de dos mil categorías en productos y servicios, utilizando tanto la modalidad de venta a precio fijo como el formato de subasta.
Francisco no paga gente de seguridad para vigilar a los comerciantes online, pues la misma página está diseñada para que la gente que compra recomiende a los vendedores.
Pedro Menéndez es vicepresidente del comité de investigación de la Asociación Mexicana de Internet (Amipci). Desde hace cuatro años han realizado estudios sobre el comportamiento de las ventas electrónicas. Hoy saben que crecen 70% al año y que quienes han disparado las ventas son indudablemente las ofertas turísticas, pues de los mil 620 millones de dólares en ventas online, 72% le pertenece a esta rama.
“Lo más comprado son los boletos de avión, es más hay aerolíneas que han desarrollado toda su estrategia comercial en internet y 80% de sus ventas son en línea”, dice el investigador.
Pero el futuro es prometedor, pues las empresas más representativas tienen comercio electrónico y están cerrando 2008 vendiendo 6% de sus productos sólo por internet. “El éxito está en las ventajas para el cliente y el comerciante, pues los precios son más baratos que en una tienda y no se necesita de ningún lugar físico, sólo una computadora”, dice.
Para el investigador, las empresas que no tengan una estrategia para vender por internet, estarán fuera de un mercado con mucho futuro.