La diputada del PRD, Ruth Zavalaeta, acompañada por los senadores de su partido Pablo Gómez y Carlos Navarrete, durante la sesión de la comisión permanente en el Senado de la República. (El Universal)
A partir de mañana el Congreso buscará desahogar una agenda de 17 temas.
Por mayoría, con sólo dos votos en contra, se aprobó la realización a partir de mañana jueves del periodo extraordinario de sesiones del Congreso de la Unión en donde se prevé desahogar una agenda de 17 temas.
En la agenda se anticipa que se legislará para modificar la minuta que habían aprobado los diputados sobre el formato del Informe presidencial; se dejará la entrega por escrito, pero se le crea al titular del Ejecutivo y a su Gabinete la obligación de responder a lo que se ha denominado “pregunta parlamentaria”.
Hay consenso en que el presidente no vaya el 1 de septiembre al recinto de San Lázaro. Sin embargo, tanto el Ejecutivo como los secretarios de despacho podrían ser citados en fecha posterior para aclarar dudas de los legisladores y por ley tendrán que decir la verdad.
Se le quitará el “veto de bolsillo” al Ejecutivo, por lo que en lo sucesivo ya no podría posponer o frenar la promulgación de lo que haya sido aprobado por el Legislativo.
A cambio, se le otorgaría el derecho de “iniciativa preferente”, hasta dos propuestas, por periodo ordinario, que el Congreso estaría obligado a dictaminar y votar. En otras palabras, no las podría enviar a la “congeladora”.
En la sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión sólo las diputadas perredistas Susana Monreal y Adriana Díaz Contreras votaron en contra del dictamen aprobado por la mayoría.
Lo objetaron porque no se incluyó en la agenda el plebiscito y el referéndum.
De acuerdo con el texto aprobado, en el periodo extraordinario también se establecería una nueva reglamentación para que el Ejecutivo no tenga que pedir permiso al Congreso cuando vaya a salir al extranjero por un plazo no mayor de siete días.
También se agilizaría el trámite de las autorizaciones para el uso de condecoraciones extranjeras, así como el trámite de los permisos para prestar servicios oficiales a un Gobierno extranjero.
En materia electoral se modificarían la Ley Federal de Radio y Televisión, la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación, Código Fiscal de la Federación y Ley de Instituciones de Crédito.
Se modificaría el Artículo tercero de la Constitución para hacer obligatoria la educación media superior, y en particular la Cámara de Diputados tendría que llevar a cabo la elección de tres consejeros del Instituto Federal Electoral.
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) lamentó que no se haya incluido en la agenda la reforma a la Constitución para establecer las figuras del plebiscito, el referéndum y la consulta popular.