Muy mala calificación sacó Coahuila en cuestiones de corrupción y buen gobierno, según un estudio de “Transparencia Mexicana”, que muestra un desliz del Estado de los primeros lugares con menos corrupción a nivel nacional, al lugar veinte este año. La primera reacción del gober Humberto Moreira fue pasar la bolita; la culpa, dijo, la tienen los municipios, no el “Gobierno de la Gente”. Tiene razón el gober cuando dice que sólo diez de los treinta y cinco criterios medidos por “Transparencia” corresponden a trámites estatales, mientras que catorce son municipales, nueve federales y dos privados. Pero el pretexto hace agua cuando resulta que los trámites en los que empeoró Coahuila corresponden al Estado (recuperar autos robados, presentar denuncias ante el Ministerio Público y llevar casos en un juzgado), mientras que la mejoría se presentó en asuntos municipales (“mordidas” de tránsito, verificación vehicular o permisos de ambulantaje). De cualquier forma, la pronunciada baja del Estado debe preocupar, sobre todo cuando hay instituciones cuya fama de corruptas nomás no se quita, sino que aumenta. En el caso de La Laguna se ve claramente en lugares como la Procuraduría de Justicia, donde tardan semanas en atender una denuncia, o el Registro Público de la Propiedad, donde prácticamente se le dio carpetazo a una auditoría sobre travesuras del sexenio anterior y ya se comenta que la actual Administración está peor. De poco servirá que don Humberto escurra el bulto si no ve la viga en el ojo propio.
* * *
Por cierto, hablando de dependencias estatales con mala fama, parece que el jefazo de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje en Torreón, David Ortiz Polanco, le ganó la partida al Gobierno del Estado, pues en la peronera capital ya se había decidido su remoción y, sin embargo, el funcionario sigue despachando. Según esto ya había empacado sus cosas, pero ahora dice que se irá cuando el Gobierno Estatal lo decida. Se suponía que ya estaba decidido, pero en la Secretaría de Gobierno, que comanda Homero Ramos, no se han animado a pasar de la teoría a la práctica. ¿Por qué será?
* * *
Hay varios refranes populares para explicar la situación que se vivió en oficinas municipales de Torreón esta semana. “Cuando el gato no está en casa, se alebrestan los ratones” o “al ojo del amo engorda el caballo”. Y es que el viajecito a París que se aventaron el alcalde José Ángel Pérez y los vicealcaldes Rodolfo Walss y Jorge Hernández sirvió a los funcionarios municipales para que se tomaran unas pequeñas vacaciones. Desiertas lucieron las oficinas durante esta semana y nuestros subagentes que deambulaban por la soledad de las dependencias, reportan que varios directores generales y de área prefirieron tomarse la semana para atender los negocios personales que tienen y que habían dejado bastante descuidados por estar sacrificándose por el pueblo (firmando en la sagrada nómina, cabe la aclaración). Los “gorronautas” (término clásico para justificar el turismo de funcionarios públicos) regresarán a trabajar este lunes. A ver si de perdido mejora algo el transporte público de la ciudad, pues según se dijo para justificar el viaje, a eso fueron a París. El Alcalde regresó anoche, pues por andar en los Campos Elíseos estuvo a punto de desairar a dos sectores clave de la vida nacional: la religión y el futbol. Pero don José Ángel regresa a tiempo para el festejo de los 50 años de la Diócesis de Torreón, que se celebrará con una misa hoy, y para el colado de las columnas del estadio del Santos, que es mañana.
* * *
Como decíamos, la Diócesis de Torreón celebra hoy su medio centenario con una explosión de color morado, de unos 50 obispos que se congregarán en el Coliseo para una magna misa. El aniversario sirvió de ocasión para resucitar un viejo plan de juntar a todos los municipios de La Laguna -no sólo los de Coahuila— y formar una nueva diócesis. Se trata de una idea impulsada hace años por sacerdotes que vienen alborotando galleras desde la década de los setenta. Lo curioso es que parece tenerles sin cuidado que el plan vaya exactamente en el sentido opuesto al de la jerarquía eclesiástica, que ya es considerado en El Vaticano, y que consiste en tomar sólo los municipios de La Laguna de Durango para formar la Diócesis de Gómez Palacio. Nuestros subagentes con sotana comentan que, tras resistencias iniciales, el plan va bastante avanzado, porque al parecer al Arzobispo de Durango, Héctor González, ya le resulta pesado tener a La Laguna duranguense bajo su jurisdicción. O sea que próximamente podríamos ver a dos obispos en la Comarca. Aunque cabe señalar que, hablando de bienes terrenales, la creación de la diócesis referida equivale a la creación del Estado de La Laguna y el Arzobispado de Durango se oponía a que le quitaran fuentes de ingresos. En fin, Dios nos agarre confesados.
* * *
En Durango se está calentando el ambiente en la Procu de Justicia, a raíz de inconformidades con el subprocurador para La Laguna, Arturo Sánchez. Últimamente, don Arturo ha hecho cambios de Ministerios Públicos que no traen muy contentos a los propios agentes, que lo acusan de autoritario. Pero eso no es lo peor, comentan nuestros subagentes disfrazados de abogados. Resulta que los cambios fueron hechos sin autorización del Procurador de Durango, Jesús Gutiérrez Vargas, y que el mismo Procurador ya no aguanta a su subalterno. Por ahí se dice que don Jesús ya le presentó la renuncia “por motivos personales” al gober Ismael Hernández Deras, porque no puede controlar a don Arturo, quien al parecer tiene el apoyo del gober. ¿Será?
* * *
La Laguna recibirá la semana próxima a la Asociación de Ciudades Hermanas México-Estados Unidos, con más de trescientos alcaldes de ambos países que se apersonarán en Torreón. El presidente de la asociación, Eduardo Iduñate, anda muy activo buscando hermanar a Torreón más allá de Fresno y Laredo y a Gómez Palacio más allá de South El Monte, California. Entre los planes están convenios con dos ciudades en China y una ¡en Irán! Lo de China se entiende, por el peso del país a nivel mundial y por el estrecho vínculo histórico (y porque todavía les debemos una reparación por la matanza). Pero lo de Irán trae a nuestros subagentes medio desconcertados, al no entender por qué quieren lazos con un país que se está convirtiendo en un paria internacional con el que nadie quiere tener nada que ver. Con eso de que el gober de Coahuila coquetea con Cuba, y Torreón quiere hermanarse con una ciudad de Irán, a ver si los gringos no empiezan a construir el muro fronterizo de cantera y seis metros de altura en Piedras Negras.
Quejas y comentarios: agente007@elsiglodetorreon.com.mx