Una curiosa transformación ha tenido el Gobierno del Estado en el último mes, pues cada vez más se parece a una promotora de espectáculos. En cinco semanas, las huestes del gober Humberto Moreira han traído a Coahuila una constelación de estrellas (algunas ya medio apagadonas, pero da lo mismo), para toda una temporada de festejos. El Día del Niño trajeron a Chabelo; para las madres en su día trajeron a Joan Sebastian.
Los maestros fueron agasajados en grande, con Gloria Trevi y Lupita D’Alessio en Torreón, y la misma Trevi y el grupo Pesado en la peronera capital. Hace unos días, para festejar al gremio periodístico en el día de la Libertad de Expresión, don Humberto arregló el entretenimiento por cuenta de Yuri y Mijares. El único que detalle que falta por conocer es cuánto costó todo este borlote, en honorarios, alojamientos, traslados, rentas y un largo etcétera, porque ya es sabido que el Gobierno Estatal es poco aficionado a mostrar estas cuentas. Esto ya es demasiado circo para tan poco pan, sobre todo ahora que el pan aumenta de precio todas las semanas. Está bien si el gober Moreira tiene vocación de agente de artistas, pero por el momento su chamba es otra y esto de la artisteada ya es un exceso, salvo que lo haya pagado de su bolsa. A lo mejor, y estamos de mal pensados.
A los que les engrosaron el portafolio ahora que corrieron a Santiago Creel de la coordinación del PAN en el Senado fue a dos laguneros: el senador y primer compadre, Guillermo Anaya, y el diputado Rogelio Carbajal. Mientras que el chihuahuense Gustavo Madero entró a reemplazar a don Santiago (quien ya bastantes problemas tenía con la revelación del retoño que tuvo con Edith González), don Memo amarró la vicecoordinación por encargo del jefazo panista Germán Martínez. Aunque no hay que descontar que, como secretario general del PAN, don Memo algo tuvo que ver en la descabezada que dieron al ex de doña Edith. Pero a cambio de su promoción en el Senado, don Memo tuvo que soltar la mencionada secretaría, que ahora caerá en manos de don Rogelio, lagunero trasplantado a la capirucha del esmog, quien es uno de los principales operadores de Felipe Calderón en la Cámara de Diputados y miembro de su círculo cercano. Nuestros subagentes comentan que el enroque vino a favorecer a don Memo, pues le quitaron la ingrata chamba de mediar entre facciones panistas (que a veces pueden ser muy latosas y beligerantes) y le dieron un “hueso” que tiene más proyección mediática, para que el compadre pueda lucirse hablando de los grandes temas nacionales (a ver cómo le va). Eso le ayudaría a don Memo si todavía tiene aspiraciones en Coahuila, mientras que a don Rogelio no se le ven muchas ambiciones electorales, por lo que no tiene necesidad de quedar bien con todas las tribus del PAN, excepto la de don Felipe, claro está.
Por cierto, don Memo anduvo en los trancazos el fin de semana pasada en la peronera capital cuando acompañó al diputado Óscar Mohammar, alias “El Muñeco” a repartir cemento a una colonia a la misma hora en que el PRI estaba repartiendo despensas. Los guamazos generaron tal bronca entre tricolor y blanquiazul que el primer compadre tuvo que hablarle al secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, para tranquilizarlo y explicarle cómo estaba la cosa, y luego hacer las paces con el gober Humberto Moreira y el hermano cómodo Rubén. (Don Juan Camilo todavía le debe una apuesta al gober, pero al parecer don Memo no la cobró). En el proceso, se espera que le apliquen un correctivo a “El Muñeco” pues últimamente ha dado de qué hablar con posturas que rayan en la violación de leyes electorales, y está claro que don Memo no puede tener estas broncas entre sus amigos si aspira a tener algo de presencia en Coahuila.
Es posible que el Papa Juan Pablo II haya cumplido ya el milagro requerido para que lo canonicen, pues al parecer revivió tres años después de su muerte frente al alcalde de Gómez Palacio, Ricardo Rebollo. A su regreso de Italia, don Ricardo comentó que, junto al gober de Durango, Ismael Hernández Deras, “tuvimos la oportunidad de saludar al Papa Juan Pablo II, y es algo que nos halaga porque es un líder mundial no importando la creencia de cada uno”. Pa’pronto un reportero le “sopló” el nombre del actual ocupante de la silla de San Pedro y don Ricardo rápido corrigió: “Ah, sí, Benedicto XVI”. Un pequeño lapsus linguae de don Ricardo, pues. Lo otro sí que hubiera sido milagroso. Aprovechando el viaje, don Ismael invitó a Su Santidad (Benedicto XVI) a visitar Durango, aunque la cosa se ve difícil pues el Papa todavía ni siquiera decide si visitará México el año que entra y, dado el caso, sería lógico que visitara otras partes de la República, pues un Papa (Juan Pablo II en 1990) ya visitó y durmió en Durango y no hay que ser abusones. Pero al menos un duranguense estaría acompañándolo muy de cerca, el Cardenal Norberto Rivera, y podría llevarle sus bendiciones al gober que, según dicen, buena falta le hacen.
Nuestros subagentes infiltrados en la Presidencia Municipal de Torreón comentan que el síndico Eduardo Albores anda bien resentido con el alcalde José Ángel Pérez porque no lo pela y porque le quieren castigar sus indisciplinas. Pero en su berrinche, don Eduardo se está llevando de cola algunas operaciones de la Presidencia, pues su firma es requerida para los cheques y no la quiere soltar a menos que le prometan que ya lo van a apapachar. Como se recordará, el síndico fue uno de los tres panistas que le agüitaron a don José Ángel los festejos por el Santos cuando se unieron al PRI para rechazarle las cuentas públicas. Luego anduvo denunciando que la dirigencia municipal del PAN anda cobrando cuotas entre funcionarios del Ayuntamiento, todo lo cual hace que los blanquiazules lo alucinen. Pero como don Eduardo todavía tiene el poder de su firma, pues se le hizo fácil cobrarse los desaires. Lo único que no se le ocurrió es que la “grilla” no cabe en asuntos de Gobierno y le va a salir el tiro por la culata (así se dice).
Pero aparte de su frente interno, el alcalde José Ángel Pérez trae entre manos una bronca mayor en el Centro Histórico. El proyecto de modernización y habilitación de dos calles peatonales para ambulantes no agarra tracción, ni con los ambulantes ni con los comerciantes establecidos de la zona. De los primeros, ni siquiera el diez por ciento se ha apuntado para obtener un módulo en los corredores de la Cepeda y Valdez Carrillo, reservando todavía su apoyo al proyecto, en parte gracias a los oficios del PRI, que está metiendo su cuchara entre los vendedores informales. En el caso de los establecidos, por primera vez se dejaron ir en bola y en público contra el plan del alcalde, argumentando el efecto negativo para sus comercios. Don José Ángel y el secretario del Ayuntamiento, Rodolfo Walss, no encontraron mejor forma de enfrentar esa oposición que minimizarla, afirmando que son un pequeño grupo y que el Municipio tiene el apoyo de la Cámara de Comercio. Pero mientras se acerca el plazo para arrancar la obra, meses de negociaciones no han rendido fruto y la percepción es que don José Ángel y don Rodolfo han privilegiado más el diálogo con los informales que con los formales. Si se pusieran a checar cuántos ingresos contribuyen al Municipio los ambulantes (cero) y los establecidos (que pagan predial y licencias) a lo mejor les cambia un poco el panorama. La cosa se complica cuando el jefazo de Finanzas del Estado, Jorge Torres, afirma que ellos no le entran a un proyecto sin consenso, por lo que es posible que, una vez más, el rescate el Centro quede trabado.
Será por el ambiente de inseguridad que priva en la Comarca Lagunera, pero los cuerpos policiacos y de procuración de justicia parecen estar fuera de sintonía de las necesidades cotidianas del ciudadano común. Nuestros subagentes reportan que el número de emergencias 066 ha perdido efectividad para responder a llamados de ayuda. Comentan un caso reciente en el que el 066 recibió una llamada de emergencia de una víctima de violencia intrafamiliar y la operadora empezó a darle largas al asunto con preguntas que ni venían al caso. La víctima en cuestión tuvo que llamar tres veces al 066 sin que le dieran respuesta o le mandaran ayuda, mientras las operadoras seguían preguntando hasta por el color de ropa. El asunto tampoco mejoró cuando la persona en cuestión quiso poner una denuncia en la Procuraduría y no encontró agente del MP que la atendiera porque le dijeron que a esas horas, en la madrugada, sólo recibían denuncias de homicidio (y siempre que el asesinado fuera rubio). A la denunciante la mandaron con cajas destempladas, muerta de miedo y sin ayuda. Bastante mal está la cosa con el crimen organizado y el temor de la población como para que las autoridades no puedan responder ni a los delitos más cotidianos.
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