Los gobernadores Humberto Moreira e Ismael Hernández Deras anduvieron ayer en la capirucha del esmog para la reunión del Consejo Nacional de Seguridad. Como se recordará, fue la última reunión de este consejo cuando se lanzó la advertencia a los que cobran en la nómina de que si no pueden con el paquete de la inseguridad, que renuncien, pero hasta ahora nadie se ha dado por aludido.
Nuestros subagentes comentan que don Humberto y don Ismael fueron a la reunión algo “enchilados” con problemillas que tienen con el Gobierno de Felipe Calderón.
En el caso del gober Moreira, anda medio enojado porque el Gobierno Federal no ha retirado la publicidad en medios de su campaña “Vivir Mejor”, en plena temporada electoral, mientras que el “Gobierno de la Gente” tuvo que guardar espectaculares y enlatar “spots” y el Gober y su Gabinete tuvieron que ponerse una mordaza.
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Por su parte, el gober Hernández Deras anda un poco molesto con el Gobierno Federal porque la Procuraduría General de la República le quitó al delegado hace como dos semanas sin avisarle y sin mandar reemplazo. Se supone que en la reunión del consejo van a ver los avances del acuerdo nacional firmado hace un mes, aunque por estos lares no se aprecia gran avance, con eso de que en Torreón los policías federales agarran a balazos a los municipales y en Durango continúan las ejecuciones. Está reunión estará cubierta por una fuerte sombra, los bombazos de Morelia, que servirán como recordatorio de que la autoridad, hasta ahora, no puede con el paquete.
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Aprovechando el viaje a la capirucha, don Humberto y don Ismael se sentarán con los diputados que elaboran el Presupuesto federal de 2009 para bajarles una lana de más, pues el proyecto de gasto le recortó mil millones de pesillos a Coahuila y dos mil a Durango, lo que significaría eliminar varios programas de Gobierno. Todavía queda dinero por repartir y los gobernadores se dejarán caer en San Lázaro como buitres para sacar hasta el último centavo. El gober Moreira se reunió ayer con el pastor de los diputados priistas, Emilio Gamboa, y los dos diputados del tricolor por Coahuila, Jericó Abramo Masso (legislador consentido del Gober) y el sampetrino Javier Guerrero, viejo rival de don Humberto. Como sucedió el año pasado, don Javier Guerrero es una pieza clave desde su chamba como número dos de la Comisión de Presupuesto, pues resulta movido para bajar más programas federales a estos lares, así que ojalá y se repita esa situación, que al diputado le vendría bien si todavía suspira con la gubernatura. (Dicen que esos suspiros se hacen vicio.) Por cierto, en lo que andan allá, los gobernadores deberían echarse una platicada sobre cómo aprovechar la avenida del Nazas y buscar fondos que permitan un rescate el río y que no se repita la situación de que el lecho quede a merced de los que le quieren meter mano, y como basurero público.
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El enfrentamiento de la Policía Federal con policías municipales y su posterior irrupción en el edificio de la Dirección de Seguridad Pública luego de la balacera, pretendía juntar elementos que involucraran a la Policía de Torreón con el crimen organizado, pero al mismo tiempo reveló una película de ineficiencias de parte del "Gobierno de la Gente". Nuestros subagentes reportan que durante la balacera la madrugada del 8 de septiembre, el Centro de Control de Crisis que maneja el Gobierno de Coahuila, en el ejido San Miguel, de plano se congeló y no pudo mover un dedo cuando de otras corporaciones se buscaba apoyo. Y eso que el mentado C-3 estaba justo enfrente de donde ocurría la balacera. Ese es el mismo C-3 que provocó un conflicto entre el gober Humberto Moreira y el alcalde José Ángel Pérez y que las huestes de aquél vendían como la octava maravilla para concentrar las comunicaciones policiacas en La Laguna. Nomás que en su prueba de fuego, no sirvió para nada. Por otra parte, nuestros subagentes reportan que cuando los federales irrumpieron en la sede de la Policía Municipal para llevarse a seis comandantes, se pusieron a verificar la situación de las armas asignadas a los agentes municipales y encontraron que sólo quince agentes tenían sus permisos de portación de armas en regla. ¡Quince de ochocientos policías que conforman la fuerza pública de la ciudad! y por ahí algunos agentes y mandos se quejaron de que la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, que comanda Fausto Destenave, tiene atorados los trámites para renovar unos setecientos permisos de portación de los agentes ante la Secretaría de la Defensa Nacional. O sea que mientras el gober Moreira y don Fausto decían que el Municipio tenía todo su apoyo, la realidad era muy diferente. Pero lejos de reconocer el error, don Fausto ahora se felicita porque su dependencia ya está agilizando el trámite, haciendo algo que debió hacer desde hace mucho. Bien se ve que a los empleados gubernamentales en Saltillo, a los que paga el pueblo de Coahuila, poco les importa Torreón. Incluyendo al Gober.
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El gerente operativo del Simas de Torreón, Luis Horacio Salmón, debió pensar que las cosas marchaban sobre ruedas en el sistema de agua de la ciudad porque decidió hacer maletas y lanzarse a Austria para conocer la empresa que venderá al Municipio los mega-tanques de almacenamiento de agua. El problema es que don Horacio se fue justo en uno de los momentos más críticos para el Simas, pues la avenida del Nazas desquició pozos en colonias del Poniente y Oriente de Torreón y dejó sin agua a miles de personas. Norias descompuestas o que arrojan agua enlodada por la filtración del río, fue el saldo que dejó el paso del Nazas y que el Simas batalla para arreglar, aunque al parecer nadie en el Municipio ve problema en el hecho de que la persona supuestamente encargada ande muy feliz en el otro lado del mundo en calidad de "gorronauta", por más que fue la empresa en cuestión la que haya pagado el viaje. Según el alcalde José Ángel Pérez, el Simas marcha sobre ruedas, pero que no se lo vaya a decir a los ciudadanos que se quedaron sin agua, porque las que entonces van a andar sobre ruedas son las mentadas. Don José Ángel también jura que el asunto de los tanques no tiene tintes electoreros, aunque nuestros subagentes reportan que en el PAN esperan recoger una buena cantidad de votos en los distritos del Oriente de Torreón gracias a los tanques que ya instalaron ahí, para darle la batalla al PRI. El otro "gorronauta" que se fue a Austria es Petar Entchev, el ex entrenador de tenis que ahora cobra de contralor del Simas y cuyo principal mérito para tal cargo es, al parecer, ser cuate de don José Ángel. No cabe duda que vivir fuera del presupuesto es vivir en el error.
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Y hablando de los que están ausentes durante la avenida del Nazas, resulta que desde hace unos días está acéfala la Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento (CEAS) pues su director, ese gran técnico de la hidráulica que es Emilio Bichara, pidió licencia para irse a jalar con el PRI durante las campañas a diputados locales. Fue uno más de los funcionarios que dejaron tantito (pero nomás tantito) la nómina y fueron prestados por el gober Humberto Moreira para echarle una mano al hermano Rubén, jefazo del tricolor que ya sabrá recompensarlos. Esta situación debe verse como afortunada pues la ausencia del ex alcalde de San Pedro evitó que metiera la pata en algún aspecto de la avenida del Nazas. Por otro lado, dejó ver que el tránsito de don Emilio del PRD al PRI ya es completo y de cuerpo entero, pues tuvo que abandonar su antiguo partido para cobijarse en la nómina estatal. Sin embargo, la separación del cargo es temporal y ya regresará a hacerse cargo del "agua de la gente".
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