Es indispensable que la sociedad se informe sobre las vías reales de contagio y elimine sus prejuicios.
El sida es una amenaza para todos; la incidencia está creciendo de manera alarmante entre amas de casa y parejas heterosexuales.
Una buena parte de los mexicanos no tiene claro qué es el VIH/sida, ni siquiera sabe cómo se contagia y desconoce que la saliva no es un transmisor del virus. Las ideas erróneas se mantienen a pesar de que casi todo mundo ha oído hablar de la enfermedad.
Una encuesta patrocinada por la farmacéutica Roche reveló que 99% de los mexicanos ha escuchado alguna información sobre el VIH/sida, pero 26% de ellos no tiene claro cuál es la causa del padecimiento y 14% cree que las relaciones homosexuales son la principal vía de transmisión.
El trabajo estadístico dejó en claro que “persiste una incorrecta y desactualizada percepción en nuestra sociedad sobre este padecimiento, un factor que puede propiciar comportamientos discriminatorios en contra de pacientes, la proliferación de estereotipos de grupos de riesgo, falta de prevención e incluso la obstrucción de tratamientos oportunos para evitar la transmisión de la enfermedad”.
Para Hugo Quiñones, gerente de grupo para la Unidad de VIH de Roche, es desafortunado que la gente no esté actualizada sobre el tema y se tome como referencia información carente de rigor científico.
“Todavía dos de cada 10 mexicanos considera que no puede convivir de manera segura con una persona infectada con VIH/sida, 13% cree que el virus puede transmitirse por la saliva, tres de cada 10 asevera que la picadura de un mosquito puede ser motivo de infección, 7% piensa que es una enfermedad exclusiva de personas homosexuales y que utilizan drogas”, señaló.
Ojo clínico
El desconocimiento lleva a que cuatro de cada 10 personas estimen que quienes sufren el mal “están infectados por su propia culpa”.
Es indispensable que la sociedad se informe sobre las vías reales de contagio y elimine sus prejuicios en contra de los grupos con prácticas de riesgo, pues la incidencia está creciendo de manera alarmante entre amas de casa y parejas heterosexuales.
Una ama de casa con 20 años de casada y paciente en tratamiento de sida dijo: “La verdad yo nunca pensé que mi pareja pudiera ser portadora del virus, llevamos más de 20 años de casados y yo estaba segura que teníamos una relación sólida y que podía confiar en él; ahora me doy cuenta que quizá de alguna manera pude haber prevenido mi contagio”.
Agregó que “es muy difícil aceptar mi condición, pero ahora sé que si sigo mi tratamiento rigurosamente puedo tener una mejor calidad de vida, por eso invito a que las mujeres casadas busquen establecer una comunicación honesta con su pareja y tomen las medidas necesarias para cuidarse”.
El doctor Carlos Cano, especialista en medicina interna de atención a pacientes con VIH, afirmó que es importante que se deje atrás la idea que conservan tres de cada 10 sobre que el VIH es una enfermedad hereditaria, o la de 85% que afirma que el bebé de una madre con sida nacerá infectado.
En todo el mundo, uno de los grandes pasos que se han dado en materia de prevención contra el virus ha sido que los médicos indiquen estudios sanguíneos a las futuras madres para detectar la presencia del virus e iniciar un tratamiento oportuno”, aseguró el experto.