Después de sorprender al mundo con una serie ofensiva de 87 yardas que le dio el título a los Gigantes de Nueva York, el quarterback Eli Manning, recibió ayer el trofeo Pete Rozelle, que se entrega al Jugador Más Valioso (JMV) del Súper Tazón. (AP)
Phoenix, Arizona.- Después de haber librado una de las batallas más memorables e increíbles en la historia de la NFL, Eli Manning asistió a la conferencia de prensa del Jugador Más Valioso del Súper Tazón XLII, para recibir las llaves de una lujosa camioneta como regalo a su actuación.
Su rostro de niño contrasta con la tremenda labor que tuvo la noche del domingo con una serie final que en estos momentos ya se compara con la de Joe Montana en el Súper Tazón XXIII contra Bengalíes de Cincinnati.
Dejó de ser el menor de los Manning para convertirse en un “gigante”, un coloso que derrotó al invencible guerrero en el juego más emocionante de la temporada, para hacerse merecedor de este reconocimiento.
El comisionado Roger Goodell se paró en el estrado para presentar al Jugador Más Valioso. Pareció un déj vu, pues hace un año hizo lo mismo un hombre de apellido igual y físicamente muy parecido, pero en esta ocasión fue Eli de quien se habló y no de su hermano mayor, Peyton.
“Hemos sido testigos de una de las actuaciones más impresionantes en la historia de la liga. Ahora estamos aquí para rendirle un reconocimiento al encargado de habernos emocionado tanto ayer (el domingo) por la noche, Eli Manning”.
Los aplausos recibieron al hombre, y aunque su rostro expresaba lo contrario, su sencillez como ser humano lo hizo agradecer con un movimiento de cabeza el recibimiento, mientras se mantenía prácticamente como una estatua para ser captado por las cámaras fotográficas.
“Gracias a todos los que están aquí presentes, creo que aquí debería estar todo el equipo, todos y cada uno de mis compañeros hicieron una gran labor, lucharon todo el tiempo, nunca se rindieron ni en los momentos más difíciles, a ellos dedico este momento”.
El “trabajador del milagro”, como ya se le nombra después de la hazaña que realizó la víspera, recibió el trofeo que lo acredita como una leyenda, pues nombres como los de Joe Montana, Terry Bradshaw, Tom Brady y su hermano hace un año recibieron este galardón.
“Me siento muy orgulloso de recibir este trofeo, es algo curioso, el año pasado fue mi hermano quien estuvo aquí, ahora soy yo, la vida es increíble”
Nueva York rendirá
tributo a sus Gigantes
La ciudad de Nueva York rendirá hoy, un cálido y popular homenaje al equipo de los Gigantes, que de forma brillante y con dramatismo se proclamó el domingo campeón del Súper Tazón, el título más preciado del fútbol americano.
Miles de neoyorquinos se prevé que saldrán a las calles para aclamar a los jugadores del club neoyorquino, que derrotó a los Patriotas de Nueva Inglaterra por 17-14 y frustró con ello el que sus rivales hicieran historia si terminaban invictos los diecinueve partidos del campeonato.
“Soy un seguidor de los Gigantes y estoy encantado de como terminó el partido”, proclamó ayer el alcalde Michael Bloomberg durante una conferencia de prensa, exultante por la sorprendente y emotiva victoria del equipo y que tuvo ocasión de presenciar en el estadio.
Numerosos neoyorquinos, que ya inundaron el centro de Manhattan nada más concluir el partido, tendrán ahora su oportunidad de mostrar a los jugadores lo orgullosos que se sienten de ellos y de la manera combativa en que ganaron a los Patriotas y a su estelar mariscal de campo, Tom Brady.
El ayuntamiento ha reservado el denominado “cañón de los héroes”, un tramo de la avenida Broadway en el sur de Manhattan que va hasta el ayuntamiento, para que a partir de las 11:00 horas (10:00 tiempo de La Laguna) los neoyorquinos que quieran y puedan presencien el desfile de sus Gigantes, entre una lluvia de confeti.
El Súper Tazón
más visto en la historia
La victoria de los Gigantes de Nueva York 17-14 sobre los Patriotas de Nueva Inglaterra fue vista por 97.5 millones de televidentes, el Súper Tazón más visto de todos los tiempos en la televisión estadounidense, reportó la empresa Nielsen Media Research.
Antes de este encuentro, el más visto había sido el Súper Tazón XXX entre los Vaqueros de Dallas y los Acereros de Pittsburgh con 94.1 millones de televidentes el 28 de enero de 1996.
La final de la NFL jugado el domingo en Phoenix, Arizona, (Súper Tazón XLII), ha sido también el segundo programa más visto en la historia de la televisión estadounidense después del final de la serie “M-A-S-H” en 1983 que fue vista por 106 millones de televidentes.
El juego entre Gigantes y Patriotas tuvo todos los ingredientes que la televisora Fox hubiera querido para mantener la atención del público todo el tiempo, ya que durante el juego los equipos nunca estuvieron separados por más de siete puntos en el marcador.
