En el ejido 20 de Noviembre, toda la comunidad acudió al velorio de Carlos Alberto Arreola de apenas 15 años. Carlos fue uno de los cinco menores que murieron el pasado viernes al volcarse el camión donde viajaban a Monterrey. (Fotografía de Fernando Compeán)
Madero vivió un día de luto. En la ciudad se respiraba el duelo. En las calles sólo se hablaba de la tragedia donde fallecieron cinco menores y otros resultaron lesionados. Todos conocen a alguien que es familiar de alguno de los adolescentes.
Lo que sería una gratificante experiencia educativa se convirtió en pesadilla. Y es que ayer cuando estudiantes y profesores de la Secundaria Venustiano Carranza viajaban a Monterrey para visitar Plaza Sésamo, fueron alcanzados por la tragedia cuando se volcó uno de los cuatro camiones donde viajaban los niños, dejando como saldo cinco menores muertos de entre 10 y 15 años, además de 26 personas heridas.
Los familiares no quieren saber nada del asunto y se concentran en velar a sus niños. Algunos culpan al conductor del autobús y su falta de pericia, otros a la empresa Transportes Cerna y unos más consideran que se trató de un accidente.
Mientras Madero se encuentra de luto, los agentes de la Policía Ministerial trabajan en la búsqueda del conductor del camión que se encuentra prófugo. El peritaje de tránsito terrestre ya fue ordenado para conocer las causas del fatal accidente, informó Gerardo Villavicencio Valdez, delegado de la Procuraduría de Justicia.
Villavicencio Valdez dijo que la prioridad es brindar apoyo asistencial a las víctimas y lesionados, así como a los familiares de los fallecidos, a la par de que el agente del Ministerio Público inició la averiguación previa penal desde que se notificó del accidente ocurrido a las 6:50 horas del viernes.
Comentó que están en espera de que sean remitidas las diligencias del Ministerio Público de Torreón que conoció de los 26 lesionados que fueron internados en el hospital Ángeles de Torreón donde cuatro ya fueron dados de alta.
Ayer los menores fueron velados en sus casas, donde se observaban grupos de jóvenes adolescentes que también acudieron al paseo escolar, todos vestidos de negro, que entre lágrimas expresaban su desconcierto.
Tras el velorio, ayer por la tarde fueron enterrados algunos de los menores mientras que otros tendrán hoy su entierro. (Con información de Luis Morales)
