Ya lo bautizaron como el “Supermartes”, pero no por alguna elección primaria sino por un nuevo capítulo callejero en la guerra entre el Gobierno y el sector agropecuario, que este martes paralizarán la capital argentina con actos de apoyo y rechazo a la política oficial para el sector agrícola-ganadero, en un conflicto que ya lleva cuatro meses.
Las cuatro entidades de productores agropecuarios, agrupados en la mesa de Enlace, apoyados por partidos y centrales obreras opositoras, se darán cita en la avenida Libertador, donde, dijeron, esperan “llevar más de 100 mil personas que llegarán de todo el país”.
En respuesta, el ex presidente Néstor Kirchner, convocó a la misma hora y en medio del “carpódromo” montado frente al Congreso, a un acto de apoyo al Gobierno de su esposa Cristina Kirchner y contra “los golpistas del campo”. Justo en la víspera a la histórica votación del Senado para decidir si se aprueba finalmente el proyecto del Gobierno para imponer retenciones fiscales a las exportaciones de granos en el orden de 44%, “las dos argentinas”, la de interior y la de los pauperizados centros urbanos, volverán a medirse. Esta vez en las calles.
Kirchner había convocado al acto en el Congreso, a la misma hora (15 horas). Pero ayer, Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), informó que “decidimos correr el acto para las 16 horas para evitar confrontaciones”.
No obstante, aseguró que “estamos buscando aún un lugar para que las miles de personas que se quedarán en Buenos Aires hasta que concluya la sesión en la Cámara de Senadores, puedan permanecer sin problemas”.
