La Asociación de Hoteles y Moteles de Durango espera que en Semana Santa tengan un buen nivel de ocupación con el arribo de turistas.
El Siglo de Durango
La Asociación de Hoteles y Moteles de Durango se alista para el periodo vacacional de Semana Santa. Su dirigente, Francisco Martínez Díaz de León, reconoce que es poco el tiempo que se tiene para la promoción.
A partir de la primera semana de marzo los hoteles desalojarán varias habitaciones porque los participantes del rodaje de Dragon Ball se marcharán. “Eso nos da la oportunidad de tener más espacios aunque sabemos que en la Semana Santa llegan las personas que vienen con rumbo a Mazatlán y tendremos cierta ocupación”, informa.
INTERÉS
Debido a que la Asociación de Agencias de Viajes considera que no hay mucha coordinación entre los prestadores de servicios turísticos, el hotelero piensa que es positivo que se tenga interés por atraer a más visitantes a la ciudad.
“Nosotros siempre les hemos insistido en que las agencias de viajes de Durango más bien se dedican a sacar gente. Hoy, con la promoción que se ha estado haciendo en el ámbito estatal, tanto de la Secretaría de Turismo federal como la estatal, vemos que la gente se ha interesado en hacer de Durango un polo de desarrollo”, conversa.
Las agencias de viajes cuentan con todo el apoyo de la Asociación de Hoteles y Moteles y hay la disposición de hacer una reunión para que se den a conocer los posibles paquetes que se pueden armar para el próximo periodo de asueto. “Es algo en lo que nosotros hemos insistido, en que trataran de hacer llegar a la gente, de promocionar a Durango para que la gente se acercara”, dice.
ATRACTIVOS
En años pasados un problema recurrente en la Semana Mayor, recuenta Martínez Díaz de León, es que los museos de la ciudad permanecían cerrados y ante la insistencia de los hoteleros de que no era posible esta situación, ya permanecen abiertos en estos días, lo cual es un aliciente para que las personas se paseen.
La celebración del Viernes Santo implica un atractivo para las personas, ya que muchas de ellas vienen a la capital para ser testigos del evento. “Es una tradición que se ha venido conservando porque en otras partes de la República se ha perdido, entonces, tiene ciertos atractivos aparte de los ya conocidos, como lo es el Centro Histórico y Villas del Oeste, es algo que se puede vender”, cita.
