La balacera registrada en el fraccionamiento Jardines de Durango es sinónimo de que ya nos alcanzó la violencia.
El Siglo de Durango
Durango. Para los legisladores locales ya está demás decir y exhortar a las corporaciones policiacas para que se coordinen, pues para José Luis López Ibáñez, diputado por el PAN, “en Durango ya nos alcanzó la violencia”. Dijo a consecuencia de la balacera que se registró por varios minutos en el fraccionamiento Jardines de Durango. Agregó que aún no se está a los niveles de Chihuahua, Tamaulipas o Sinaloa, pero “ya vamos para allá”, expuso.
Es casi inútil seguir diciendo lo que hay que hacer
Los hechos violentos en donde participarón elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP), Ejército, agentes de la Dirección Estatal de Investigación (DEI), preventivos y Agentes Federales de Investigación (AFI), tomaron por sorpresa a muchos ciudadanos. Para el legislador solamente hay que decir que las autoridades tienen que seguir sus esfuerzos y se les debe exhortar para que busquen la coordinación, pero consideró casi inútil que se hagan estas declaraciones puesto que son declaraciones que han hecho durante mucho tiempo, sin que haya resultados positivos. Consideró que aún no es necesario un toque de queda en el estado, “porque no dejan de ser ellos mismos los que están involucrados en el crimen organizado”, indicó.
Encuestas.- En Sinaloa una encuesta reveló que tres de cada diez mexicanos aceptan que los criminales se adueñan de las calles y espacios públicos.
Percepción.- En el estudio cinco de cada diez sinaloenses perciben que el Gobierno está perdiendo la guerra contra el crimen organizado.
Debilidad.- En Sinaloa se percibe debilidad policial cuando hay enfrentamientos, por las armas que portan los delincuentes y sus estrategias.
Hipótesis.- Los levantones que comenzaron desde el 2006 en contra de policías estatales fueron apenas el comienzo de una guerra contra el narcotráfico.
Estrategias.- Las decapitaciones que se atribuyen a Los Zetas fueron otro factor de avance en la violencia del crimen organizado. Es el comienzo.
