Al menos 60 personas murieron hoy en Irak y otras 130 resultaron heridas en dos atentados suicida simultáneos perpetrados en un santuario shií de Bagdad, un día después de que otra jornada sangrienta dejara 84 muertos y más de 120 heridos. EFE
Dos atentados suicidas sucesivos dejaron el viernes un tendal de 60 muertos frente al principal santuario shií en Bagdad, un día después que Irak se vio conmovido por el hecho de violencia más mortífero en más de un año.
Los ataques dinamiteros del viernes y el jueves —con unos 140 muertos en total— son los más recientes en una serie de atentados atribuidos a insurgentes suníes, dijeron funcionarios policiales.
Los atacantes del viernes se inmolaron con minutos de diferencia cerca de distintas entradas a la tumba del santo shií Imán Mousa al-Kazim, en el vecindario de Kazimiya, dijo un funcionario policial. Otro policía dijo que los ataques tuvieron lugar poco antes del comienzo de las plegarias del viernes cuando los peregrinos entraban en la mezquita.
Entre los muertos había 25 peregrinos iraníes, dijeron un policía y un funcionario de un hospital. Los dos dijeron que los ataques dejaron al menos 125 heridos, incluyendo 80 peregrinos iraníes.
Todas las fuentes hablaron con la condición del anonimato por no estar autorizadas a difundir la información.
El santuario ha sido blanco predilecto de los insurgentes, más recientemente a comienzos de mes donde una bomba dejada en un bolsa de plástico en las cercanías dejó 7 muertos y 23 heridos.
