En lo que va del año, alrededor de 650 mil mexicanos han perdido su empleo y si se suma el millón de emigrantes que podrían regresar al país por la debilidad de la economía estadounidense, podemos advertir que 2009 será uno de los peores años en materia laboral, afirmó David Arkless, presidente de Manpower.
Y para el año entrante, la perspectiva no es más halagüeña, pues se agrega a la recesión los problemas por la caída en los precios del petróleo, el turismo va la baja, la caída de los niveles de remesas, el comercio está a la baja, y por último, la inversión extranjera directa que se ha contraído.
En entrevista, el gurú en temas económicos de Manpower señaló que los recursos petroleros obtenidos durante 2008 fueron “pésimamente administrados por el gobierno federal, ya que podría haberse empleado para fortalecer a la planta productiva que hubiera ayudado a reducir el impacto de la crisis mundial en la economía mexicana”.
Así, mientras la economía de Estados Unidos muestra signos de recuperación, para México las cosas se están poniéndose cada vez más difícil, apuntó.
“Sabemos que el gobierno está ávido de dinero, sin embargo, no ha tomado cartas en el asunto para terminar con el comercio informal que representa 60% de la actividad comercial, lo que esta dañando al sector productivo nacional”, aseveró.
El problema que está padeciendo el país no sólo compete a las autoridades, sino también al sector privado que debe trabajar en conjunto para reactivar a la economía nacional. Pero hay un punto determinante que se debe tomar en cuenta que es la velocidad en la que México convierte la políticas o leyes en acción, indica el experto en materia de empleo global.
“En guerras famosas o en crisis, la diferencia entre perder o ganar, es la gente que toma acción, es la que gana, así que mensaje es que el gobierno mexicano necesita tomar medidas, pero también el sector privado tiene que actuar”, señaló.
Es de vital importancia aumentar la participación en comercio exterior, para esto se necesita una fuerza laborar muy capacitada y altamente productiva, agrega el presidente de asuntos públicos y corporativos de Manpower Globales.
Otro punto esencial, es que los recursos humanos sean competitivos para atraer mayores inversiones al país, en una encuesta aplicada mil empresas de Estados Unidos para determinar de que manera se elige a la nación para llevar sus capitales productivos, y señalaron que los recursos humanos capacitados con el factor determinante.
“Entonces podemos señalar que los problemas más importante para la fuerza laboral mexicana son dos, educación-capacitación y flexibilidad laboral”, indicó.
En las relaciones futuras en el marco de Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, México necesita una tener una presencia más fuerte basada en su gente y en el talento, las empresas estadounidenses requieren fuerza de trabajo calificada y de bajo costo para cubrir las necesidades propias.
David Arkless expone que entre los objetivos inmediatos para México se encuentran el elevar los estándares en educación y capacitación, que es una de las principales ventajas para poder competir, por eso es importante invertir en escuelas, desarrollo y capacitación. Estos son los elementos básicos para que el país pueda crecer y salir de la crisis.
No solamente la maquila es la fortaleza de México, gran parte del Producto Interno Bruto (PIB) proviene de la agricultura y productos derivados de ésta, por ello, el gobierno ha adoptado medidas interesantes en la parte de agricultura, por ejemplo con Japón, solamente puede producir 40% de su consumo de alimentación, ahí podría ser un buen abastecedor de alimentos al país asiático, pero esto depende de mantener a la gente que pueda producir bienes de agricultura y los están perdiendo, esto debería ser una alta prioridad.
Tendrán que virar hacia Centroamérica como zona de oportunidades y liderazgo en materia de comercio, de igual forma México debe recuperar los sectores que como socios comerciales de Estados Unidos han perdido con los Chinos.
