Se debilita el poder adquisitivo de la clase trabajadora ante la ola de incrementos.
Citlalli Zoé Sánchez
El Siglo de Durango
Durango
A trabajo igual, salario igual. Así lo reza la Constitución de México, pero en Durango esto no es una realidad, lamenta José Gabriel Rodríguez Villa, legislador local.
“Durango se encuentra en la zona económica número tres, la más baja. Donde los obreros hacen el mismo trabajo pero reciben un sueldo inferior que en otros estados”, puntualiza el Presidente de la Comisión de Trabajo, Previsión y Seguridad Social del Congreso Estatal.
“Tenemos un costo un poco más elevado en la enerfía eléctrica y donde finalmente el ingreso no alcanza”, lamenta.
lamentable
Reflexiona que el poder adquisitivo de las personas se va perdiendo día con día.
“No es posible que los combustibles hayan tenido un aumento pero el salario siga siendo el mismo. Los alimentos se han incrementado en 40 por ciento en el último año”, visualiza.
“No hay mexicanos de primera, segunda o de tercera. Tan mexicano es el de Chiapas como el de Sonora y el de Durango, debe existir una paridad en cuanto al ingreso con los compromisos”, argumenta.
austeridad
“A diferencia de lo que dice la Carta Magna, de que a trabajo igual corresponde salario igual, en Durango hacemos el mismo trabajo que en otras zonas del país pero se paga menos y los costos son más elevados._La realidad es que a trabajo igual, no corresponde salario igual”, describe.
Derechos otorgados por la ley
El artículo 123 de la Constitución Mexicana establece que toda persona tiene derecho al trabajo digno y socialmente útil.
La Carta Magna indica que los salarios mínimos generales deben ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos.
Los salarios mínimos profesionales se fijarán considerando, además, las condiciones de las distintas actividades económicas existentes.
Y es en el apartado siete del citado artículo donde indica: “para trabajo igual debe corresponder salario igual, sin tener en cuenta sexo ni nacionalidad”.
Las empresas, cualquiera que sea su actividad, estarán obligadas a proporcionar a sus trabajadores capacitación o adiestramiento para el trabajo. La ley reglamentaria determinará los sistemas, métodos y procedimientos conforme a los cuales los patrones deberán cumplir con dicha obligación.
La duración de la jornada máxima será de ocho horas de labores; en trabajo nocturno es de siete horas, según está plasmado en la Constitución.
alonso salazar / El Siglo de Durango.
Desigualdad. Los obreros de Durango se caracterizan por su mano de obra calificada, pero su salario es mucho menor que el de otros trabajadores en diferentes partes del país.
Punto de vista
José Gabriel Rodríguez Villa, diputado local, opina lo siguiente:
Aunado a los bajos salarios hay un desempleo que crece día con día, además de inseguridad.
La crisis financiera afecta a todo el sector productivo y también las percepciones salariales.