Seguridad. Gerardo Garza Treviño, dijo que a tres años del accidente en el que murieron 65 trabajadores en Pasta de Conchos, falta mejorar las condiciones de seguridad en las minas de carbón.
Familiares de las víctimas aún tienen la esperanza de recuperar los cuerpos.
En el tercer aniversario luctuoso, familiares de los 65 trabajadores muertos en la explosión de la mina "Pasta de Conchos", pasaron la noche en vela. Oraron ante un altar en el que colocaron velas, flores, y fotografías de sus seres queridos, 63 de los cuales siguen enterrados en el tiro de carbón, pues únicamente dos cadáveres fueron recuperados.
Mujeres como Rosa Mejía, viuda de Rolando Alcocer que prácticamente no se ha despegado del lugar en todo este tiempo, ruegan al creador y a la Virgen de Guadalupe por que les concedan el milagro de poder darles cristiana sepultura a sus muertos.
Con su demanda "¡A una voz; Rescate Ya!", pernoctaron fuera de la mina, en el municipio de San Juan de Sabinas, justo a unos metros de donde ocurrió la tragedia el 19 de febrero de 2006, debido a una alta concentración de gas metano y falta de medidas de seguridad en el interior, lo que provocó un estallido que segó la vida a todos los trabajadores del tercer turno.
Pasta de Conchos es propiedad de Industrial Minera México S.A., subsidiaria de Grupo México. La compañía suspendió la búsqueda el día 3 de abril de 2007, debido a altas concentraciones de gas metano que, aseguró, podían provocar otra explosión.
Algunas viudas, padres e hijos de las víctimas aún mantienen la esperanza de que se reanude el rastreo y logren recuperar los restos de los fallecidos.
Durante los últimos meses cuadrillas de trabajadores, contratados por varias viudas con el apoyo del Sindicato Minero Nacional y del ex líder, Napoleón Gómez Urrutia, autoexiliado en Canadá, tratan de rehabilitar el acceso al socavón.
Empero, el avance ha sido difícil pues se han topado con una serie de obstáculos y no han logrado pasar de la diagonal 14.
Mientras tanto, el obispo de Piedras Negras, Alonso Gerardo Garza Treviño, ofició ayer una misa en la entrada de la mina para recordar el tercer aniversario de la tragedia, a la que asistieron más de 250 personas entre viudas, amigos y familiares.
INTERPONDRÁN DENUNCIA ANTE COMISIÓN INTERAMERICANA
Ayer se dio a conocer que los familiares de las víctimas interpondrán una denuncia en los próximos meses ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En entrevista, la vocera de los inconformes, Elvira Martínez, dijo que el documento que será entregado al organismo internacional, señala lo que consideran como irregularidades al no procederse con el rescate de los cuerpos.
Demanda Napoleón seguridad laboral
El líder sindical Napoleón Gómez Urrutia, refugiado en Canadá y cuya extradición fue solicitada por México a ese país, reapareció ayer en una videoconferencia para demandar seguridad laboral, a tres años de la tragedia del yacimiento de Pasta de Conchos.
En un acto para recordar la tragedia que costó la vida a 65 mineros en Pasta de Conchos, en Coahuila, Gómez Urrutia pidió una Ley que penalice la "inseguridad" laboral en las actividades industriales y económicas en el país.
"Si hoy tuviéramos esa Ley, German Larrea (dueño del Grupo México, que explotaba aquella mina), todos los de su Consejo de Administración y su cuerpo directivo estarían en la cárcel pagando las culpas de ese crimen", denunció Gómez Urrutia.
En una videoconferencia desde Canadá, donde se encuentra prófugo desde hace casi tres años, el secretario general del Sindicato Minero recordó que continúa habiendo impunidad por aquellas muertes.
Gómez Urrutia no aludió en ningún momento a la petición de extradición a Canadá anunciada por el Gobierno de México.