EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- En la etapa final del proceso, los cuatro agentes aprehensores de la Policía Federal de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), acudieron al careo solicitado por la defensa de los 35 policías preventivos de Torreón que fueron detenidos luego de un enfrentamiento a balazos el pasado 8 de septiembre de 2008. Los agentes federales declararon que siempre estuvieron en el interior del edificio de San Miguel y no participaron en la detención de los municipales.
Alejandro López Hernández, abogado defensor de los policías municipales, se manifestó optimista luego de interrogar a los agentes federales que en resumidas cuentas, “por estar custodiando a los dos policías y los civiles detenidos en unas oficinas, no pudieron ver lo que ocurría en el exterior de su base, que estaba a 200 metros de distancia aproximadamente”.
Con esta versión el penalista busca demostrar que no hay quién señale la detención de sus defendidos y no se acredita entonces su comisión en algún tipo de delito. La diligencia se llevó a cabo en el Juzgado Segundo de Distrito, donde se lleva el proceso que en su fecha implicó un auto de formal prisión.
La defensa de los policías municipales informó que la mañana del jueves 15 de enero del presente y hasta las 16:00 horas, se llevó a cabo la dirigencia donde cuestionaron a los agentes que al menos en un documento, son señalados como los que lograron la detención de 35 elementos afuera de la base del ejido San Miguel en la citada fecha.
Con la comparecencia de los cuatro agentes federales la defensa espera demostrar una serie de irregularidades que ahora se enfocan a la única de ocho acusaciones que inicialmente tuvo el Ministerio Público de la Federación contra los municipales y que ahora sólo es por evasión de reos en grado de tentativa.
Poco más de cuatro meses desde su detención, han transcurrido y la defensa confía además en los buenos resultados que pueden obtener a fin de mes, ante el Primer Tribunal Unitario, donde en días pasados se pidió que el magistrado recibiera las pruebas que tuvo en su momento el juez de Distrito y que proporcionó el Ministerio Público de la Federación para que se dictara el auto de formal prisión por el cual hay un juicio de Amparo.
De los 35 policías, sólo dos tienen otros cargos por delitos contra la salud, pero los 33 restantes están en espera del veredicto del magistrado para fin de mes, y tienen la esperanza de abandonar el Centro de Readaptación Social (Cereso).
