El primer ministro italiano Silvio Berlusconi acusó hoy a Patrizia D'Addario, la prostituta de lujo pagada para participar en sus fiestas, de haber recibido 'un mandato muy preciso y retribuido' para atacarlo.
El primer ministro italiano Silvio Berlusconi acusó hoy a Patrizia D'Addario, la prostituta de lujo pagada para participar en sus fiestas, de haber recibido 'un mandato muy preciso y retribuido' para atacarlo.
En una entrevista con el semanario Chi, de la casa editorial Mondadori (propiedad de Berlusconi), Il Cavaliere también negó haber pagado a mujeres para tener relaciones sexuales.
'Detrás de la indagación de (la fiscalía) de Bari hay alguien que ha dado un mandato muy preciso y bien retribuido a esta señora D'Addario', declaró el premier en la entrevista, que aparecerá en el próximo número de Chi pero cuyo contenido fue dado a conocer hoy.
D'Addario es la protagonista central del nuevo escándalo en el que se ve envuelto el jefe de gobierno italiano.
La mujer, de 42 años de edad, confirmó a la prensa y a la fiscalía de Bari (que indaga sobre presunta inducción a la prostitución), haber sido pagada por asistir a dos fiestas de Berlusconi en el Palacio Grazzioli, la residencia en Roma del primer ministro.
La 'escort' (prostituta de lujo) presentó a los magistrados las grabaciones con audio y video de los encuentros con Il Cavaliere con quien, según otras testigos, habría mantenido relaciones sexuales.
Pero en su entrevista con Chi, Berlusconi acusó a la D'Addario de haber recibido dinero de alguien que no identificó para dañarlo.
'Nunca he pagado a una mujer. No entiendo donde está la satisfacción si no existe el placer de la conquista', añadió.
Cuestionado sobre si sospechaba que D'Addario era una prostituta de 'alto bordo', el premier dijo: 'si sospechara de una persona una cosa de ese tipo me mantendría lejos mil millas'.
La fiscalía de Bari abrió la indagación sobre inducción a la prostitución tras interceptar conversaciones telefónicas del empresario Gianpaolo Tarantini, acusado de pagar sobornos y obtener concesiones para su sociedad Tecnohospital, quien hablaba del pago a mujeres que iban a fiestas de Berlusconi.
Pero el primer ministro aseguró haber conocido a Tarantini el verano pasado y que 'me fue presentado como un empresario muy serio y estimado'.
'Ahora que está bajo indagación pienso que para él, como para todo ciudadano involucrado en una acción judicial, debe valer la presunción de inocencia', opinó.
'No hay nada en mi vida privada por lo que deba disculparme; hay, en cambio, muchos editores y directores de los principales cotidianos italianos que deberían avergonzarse y disculparse conmigo; pero no lo harán y perderán la credibilidad de sus lectores', añadió.
Berlusconi también habló del fotógrafo Antonello Zappadu, acusado de violar la privacidad de su villa en Cerdeña, por haber tomado miles de fotografías de las fiestas del primer ministro y de sus invitados.
'Pienso que los servicios secretos se ocupan de cosas más serias que de las fotos de Zappadu. Ninguno de mis huéspedes ha sido sometido nunca a una revisión personal; si después alguien abusa de mi cortesía y de mi buena fe y viola mi privacidad, es una conducta que lo descalifica a él, no a mí', dijo.
Además, Berlusconi habló de su esposa Verónica Lario, quien a inicios de mayo pasado le pidió el divorcio y lo acusó de 'frecuentar a menores de edad'.
'Ha sido una herida muy dolorosa; no sé si el tiempo podrá cicatrizarla, lo que es cierto es que la nuestra fue una gran historia de amor y las verdaderas historias de amor no se cancelan nunca; estoy sereno, triste, pero sereno', dijo.
Asimismo, aseguró que el 'lodo' que le ha sido lanzado, lo ha unido más que nunca con sus cinco hijos (dos de su primer matrimonio y tres de su unión con Lario).
Ello mientras la prensa informó este martes que la D'Addario entregó a la fiscalía de Bari otras seis grabaciones sobre sus encuentros con Berlusconi en el Palacio Grazioli.
Al tiempo que los magistrados podrían citar a declarar a los guardaespaldas del primer ministro, que habrían sido testigos de los hechos.
Según los medios, en los próximos días otras 30 chicas serán llamadas a declarar, luego de que cuatro, entre ellas D'Addario, confirmaron haber recibido dinero por participar en las fiestas de Il Cavaliere.