Adiós al 'Rey Midas' de la televisión
Pedro Damián, productor de Rebelde, vio como se hundía Verano de Amor.
MÉXICO, DF.- Se le consideró un productor que, como el “rey Midas”, todo lo que tocaba lo convertía en oro, en un buen rating. No obstante, después del éxito de Rebelde y de la agrupación que salió de ésta, RBD, además de Lola, Érase una Vez, por primera vez Pedro Damián vio cómo con Verano de Amor terminaba su buena racha.
Mientras que el melodrama que recién concluyó duró casi seis meses, el éxito de Verano del 98, historia argentina en la que se basó la mexicana, se mantuvo al aire dos años.
´¿Verano de Amor fue un fracaso?
Yo lo veo de esta manera: si no pierdes, cómo sabes que ganas. Es un dicho que escuché y es la verdad.
“La vida es así. No lo veo como un fracaso porque el asumirlo significa, desde el punto de vista emocional, que a lo mejor te sientas deprimido y quieras cambiar ya todo, y la verdad no. Lo ves como un aprendizaje, una lección de vida”, responde el también actor y director de teatro de 56 años. “Además no fue un fracaso”.
“Evidentemente el haber mantenido un promedio de 13 o 14 puntos de rating no lo convierte en eso. No es la cifra expectante que todo mundo quiere ver de pronto, pero no es un fracaso. Ese porcentaje es igual a millones de personas que disfrutaron de nuestro trabajo.
´Después de una buena racha con varios productos, como el exitoso RBD ¿te sientes desilusionado?
No. (Pero) te caes porque de pronto te dicen que hay que hacer esto, lo otro, o que hay que recortar la historia o que no. Todo eso crea confusión y desgaste en el propio público.
´Pedro Muñoz Romero (su nombre de nacimiento), quien que se iniciara en la actuación a los 19 años con el melodrama El Amor Tiene Cara de Mujer, comenta cuáles fueron algunos de los factores que provocaron el fin de Verano de Amor.
“Esta ha sido una experiencia muy valiosa en muchos sentidos. Ha sido una historia que me ha dejado mucho, me ha enseñado y me sigue enseñando. Verano de Amor se convirtió en una novela de nicho, es decir, que en lugar de llegar a un mayor público, como estaba planeado, se redujo a una audiencia juvenil.
“Muchas veces creemos que una historia tiene los ingredientes suficientes para atrapar a toda la gente, pero de repente te das cuenta que el público cambia de la noche a la mañana. Hay muchos factores que intervienen en que un producto tenga la resonancia tan explosiva como Rebelde, ya sea por cuestiones de tiempo, de orden, político, o hasta de clima, financiera... situaciones emocionales colectivas. Sin embargo, hay que seguir creyendo en la intuición”.
´¿Qué te dice la intuición hoy?
Pues que debo seguir buscando historias que a mí me gusten, que me emocionen. No importa si es una original o una adaptación que haya funcionado muy bien. Lo más importante de nuestro trabajo es transmitir emociones con las que se identifique la audiencia.
“Empezaré a leer historias y tratar de regresar pronto; no me gustaría detenerme demasiado. Si quieres buscar al gran público y lograr ratings muy altos, tienes que adaptarte a ellos. Ahora les interesan otras plataformas.
´El primer estelar de Maite, también ex RBD, fue un éxito. Con su papel dejó atrás ese lado adolescente; se vio más madura. ¿Le faltó eso a Dulce?
Dulce María es una de las artistas, sin menospreciar por supuesto a ninguna de las otras chicas de RBD o demás actrices de la televisión, cine y teatro, que lo está haciendo muy bien.
“Ella es una de las exponentes más interesantes de actrices que tenemos en este momento”.
´Entonces, ¿la telenovela juvenil ya no es algo que funcione actualmente?
Pienso que sí... La idea es que puedas generar interés en niños, amas de casa, jóvenes y adultos; algo complejo.
Damián participará próximamente en el filme Deseo, lo que lo tiene feliz.