Filadelfia dio la sorpresa al vencer como visitantes a los campeones Gigantes de Nueva York 23 a 11. Mientras que Pittsburgh fue el único local que consiguió su pase a la final de conferencia, al derrotar 35-24 a San Diego.
Águilas de Filadelfia se clasificó a la final de la Conferencia Nacional, al derrotar ayer a domicilio a los campeones defensores de la NFL, Gigantes de Nueva York, por 23 puntos a 11.
Con este resultado, Águilas disputará el próximpo fin de semana como visitante el pase al Super Tazón XLIII, cuando visiten a Cardenales de Arizona, que la víspera dejó en el camino a Panteras de Carolina, al que apabulló 33-13.
Filadelfia derrotó por 48-20 a los Cardenales en la temporada regular, en un partido nocturno del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos. “Se siente como pasó hace años”, dijo McNabb.
La clave para el triunfo de Filadelfia fue que su defensa detuvo en momentos cruciales la ofensiva de los Gigantes, en dos ocasiones en cuarta oportunidad y dos más que impidió que llegaran a sus diagonales obligando a su rival a salir con goles de campo.
Un año después de que las victorias de visitantes allanaron el camino de los Gigantes hacia el campeonato, las Águilas parecen estar repitiendo esa misma vía. Filadelfia comenzó su postemporada llevándose una victoria en Minnesota y después de su sexto triunfo en siete oportunidades, no se parece en nada al equipo que necesitaba de varios golpes de suerte en el último día de la campaña para avanzar a los playoffs.
David Akers acertó tres goles de campo -con lo que extendió su marca de la liga con 18 intentos consecutivos en la postemporada- para frenar a los Gigantes (12-5), primeros preclasificados en los playoffs.
Manning nunca se mostró como el quarterback que ganó el Super Tazón el año pasado con un pase perfecto a Plaxico Burress. El mariscal de campo, quien fue el Jugador Más Valioso en esa victoria sorpresiva sobre unos Patriots de Nueva Inglaterra que marchaban invictos, se vio en problemas desde el comienzo del partido.
Su primer pase se le escapó de la mano, fue desviado por el viento y no llegó a un receptor que estaba desmarcado.
“Todo se resume en lo que puedes hacer en los playoffs. Eso es lo que hace de tu temporada algo bueno o algo decepcionante, y es una decepción”, dijo Manning.
“Sentimos que este era un equipo especial y que iríamos lejos. La defensiva tuvo un gran partido y nos diooportunidades, pero ofensivamente no logramos hacer el trabajo, pues no anotamos los puntos suficientes”, agregó Manning.
Para los últimos dos minutos del partido, más de la mitad del público que había atestado el estadio de los Gigantes ya se había marchado. Curiosamente, los Gigantes no ganan un partido de playoffs en su estadio desde el 2000.
Por su parte, los aficionados de Filadelfia se encaminaron a la carretera luego de otra gran victoria para su ciudad. Los Filis de Filadelfia ganaron la Serie Mundial del beisbol de las Grandes Ligas en octubre.
“En el vestidor había muchísima energía. Estábamos listos para jugar desde principios de la semana”, dijo McNabb, quien agregó que “la ciudad de Filadelfia está animada y este equipo también está motivado”.
El partido se jugó bajó condiciones y viento helados y resultó el tipo de duelo rudo que muchos esperaban de dos equipos que se han enfrentado en ocho ocasiones en las últimas tres temporadas. Varios altercados surgieron desde el comienzo del partido y los golpes duros se repartieron toda la tarde. Fue la segunda victoria de las Águilas en el estadio de los Gigantes en esta temporada. Fueron el único equipo que se llevó una victoria en el estadio de los Gigantes en esta temporada.
Anotación por cuartos
Filadelfia 7 3 3 10 - 23
Gigantes 3 5 3 0 - 11